LERMA, Méx. (EL UNIVERSAL).- En el mes de marzo fueron reportadas como desaparecidas ante la Fiscalía General de Justicia (FGJEM), pero los familiares de ambas víctimas coincidieron en que las autoridades no han avanzado en la investigación y piden ayuda a la ciudadanía para dar con el paradero de Liliana García Zenil de 10 años y de Dafne Giselle Garcés Juárez de 21 años.
Liliana fue reportada como desaparecida en Lerma el 10 de marzo, y Dafne de 21 años, el 26 de marzo en Almoloya de Juárez. En ambos casos las familias conformaron células de búsqueda, en las que participan los vecinos y amigos, coincidieron en que la Fiscalía no presenta avances.
Ellas forman parte de las mil 468 personas reportadas como desaparecidas entre enero y marzo de 2022, de las que se han localizado a mil 104.
Norma Isabel Dávila Rivas es tía de Liliana, platicó que la niña salió de su casa, sus familiares pensaron que como todos los días habría acompañando a su hermana Yoselin de 15 años, pero no fue así, y tras verla caminando por la calle, no se supo más de su paradero.
«Pensamos que regresaban, como era normal. Al día siguiente las buscamos con una de sus hermanas que está en Atarasquillo, pero no hubo respuesta«.
Comentó que la familia levantó la denuncia por su desaparición hasta el 19 de abril, pues tenían la esperanza de que la mejor se hubiera ido con su hermana o salido con alguno de sus amigos, aunque a través de las redes sociales sí pidieron ayuda para dar con la niña.
Acusó que tanto la Fiscalía General de Justicia mexiquense como el ayuntamiento les dan largas, no avanzan en la investigación, ni han agilizado la búsqueda, pues hasta ahora solo gracias a la familia, han iniciado células y trabajos de búsqueda.
En el caso de Giselle desapareció hace un mes en el municipio de Almoloya de Juárez y todavía no hay rastro de ella, razón por la que su mamá y vecinos de la comunidad se unieron en una célula que la busca día y noche, «en cada rincón de la zona, a fin de tener alguna pista que los lleve a su paradero«.
Su mamá explicó que pasó un mes de su desaparición, pero las autoridades no han mostrado avances en la investigación, aunque reconoció que su hija no llevaba celular y por esa forma no la pudieron rastrear y eso ha complicado su búsqueda, pero tengo fe en Dios de encontrar a mi hija.