La tortilla podría encarecer de nueva cuenta en el corto plazo y llegar a los 24 o hasta los 25 pesos el kilogramo, a causa de los irrefrenables aumentos en los insumos que están golpeando fuerte en los costos de producción.
Industriales del ramo advirtieron que los granos de maíz, la harina y el gas no dejan de aparecer con nuevos precios, por lo que será necesario aplicar un incremento más al producto base de la alimentación de las familias para evitar la descapitalización y los cierres de las tortillerías.
Con el pretexto de las importaciones y los efectos del conflicto bélico que libran Rusia y Ucrania, las importadoras y las empresas harineras recién aplicaron otro aumento al precio del maíz y advirtieron que vendrán otros ajustes más, con lo que el encarecimiento de la tortilla se vuelve prácticamente ineludible en cualquier momento.
Con el precio actual, que va de los 18 a los 22 pesos el kilo, “se le está perdiendo al negocio”, por lo que aseguran los elaboradores de tortilla que no les quedará otra opción más que la de subir nuevamente el precio para tratar de equilibrar las cosas y evitar los cierres y con ello la pérdida de empleos en el sector.
“Sabemos que encarecer la tortilla afecta la menguada economía de las familias, pero también los proveedores y la indiferencia del Gobierno que no otorga ningún tipo de estímulo, nos deja otra opción, de manera que es aumentar o cerrar las tortillerías”, mencionaron elaboradores de ese producto básico.