Personal del Hospital de Psiquiatría, tras hacer la enésima denuncia pública de presuntos casos de acoso, hostigamiento y abuso en su contra, exigió la intervención de las autoridades para investigar, castigar y no proteger a los responsables de esos hechos deleznables.
Señalando a uno de los presuntos responsables de acoso y de incurrir en la “famosa terapia afectiva” para aprovecharse de las mujeres, así como a los directivos que supuestamente los solapan, los denunciantes advirtieron que el caso se llevará hasta las autoridades y la instancia que sea necesaria, a fin de que se tomen cartas en el asunto y se separe del servicio a quienes molestan a las mujeres trabajadoras y a quienes realizan su preparación profesional en el Hospital de Psiquiatría.
Es necesario que la gente del ISSEA y del Gobierno central investigue lo que ha venido sucediendo desde tiempo atrás en el Psiquiátrico y que además se termine con la actitud displicente y complaciente de los mismos directivos, los cuales, se advierte, hasta ahora han hecho caso omiso de estos delicados señalamientos.
“Recientemente se han encendido las señales de alerta por acoso nuevamente, ya que en estos días se recibió una queja de acoso por parte de una pasante en contra de un psicólogo con antecedentes de acosador”, se advierte en el documento que personal la misma unidad especializada hizo llegar a HIDROCÁLIDO para denunciar ese tipo de irregularidades que, se asegura, han estado siendo solapadas o cuando menos pasadas por alto por quienes están al frente de la institución.
En ese marco y luego de exponer el caso de una pasante de psicología que presuntamente sufrió acoso y hostigamiento de parte de un psicólogo que “al parecer está siendo protegido por la subdirectoraAdriana Romo Alvarado”, los trabajadores que suscriben la denuncia pública exponen que “existen antecedentes de pacientes y familiares de CAPRA que han sufrido de su famosa ‘terapia afectiva’, la cual consiste en pedirles expresar emociones a través de abrazos, los cuales aprovechaba para besarlas y hacer tocamientos. Todo esto acompañado siempre de insinuaciones y propuestas de tipo sexual”.
Se advierte también que “aunque se tienen antecedentes y es conocido todo esto por autoridades de dicha institución, (a los presuntos responsables) nunca se les ha podido sancionar, ni siquiera mover de dicha área debido a la protección de quien ahora funge como subdirectora, quien también tiene antecedentes de hostigamiento y maltrato hacia pasantes de diversas áreas, a quienes constantemente amedrenta y amenaza con suspenderles el servicio social y de ser necesario hasta evitar logren conseguir trabajo dentro de la Secretaría de Salud si los afectados dañan su imagen”.