Nuevamente el ex-gobernador César Duarte es noticia, pero ahora porque de Estados Unidos fue extraditado para que enfrente a la justicia mexicana, donde le espera juicio por peculado y asociación delictuosa.
Esto parece noticia vieja pero no lo es, sucede que no es el único ex-gobernador en enfrentar la ley, y hasta eso, son políticos de todos los partidos políticos, el más reciente en ser aprehendido fue Jaime Rodríguez Calderón, el famoso ‘Bronco’, que por cierto enfrenta graves problemas de salud.
El de Chihuahua se une a los otros ex-mandatarios que actualmente están en prisión, y esto suena a venganza, pero el que advierte no es traidor: el presidente López Obrador prometió, a su llegada a la Presidencia, limpiar de corrupción al país, caiga quien caiga, y lo está cumpliendo, aunque en el proceso varios se le están escabullendo.
Pero al Mandatario se le están yendo los peces gordos del narco, los grandes delincuentes, muchos de ellos de cuello blanco, a los que desaparecen, secuestran, violan, asesinan, para ellos el trato es diferente… puro amor, ‘porque se lo merecen’.
Y es ahí donde la percepción de justicia cambia, porque no es posible que a algunos sí se les aplique pero a muchos otros no, cuando lo merecen por el rosario de irregularidades cometidos en contra de la sociedad mexicana, tan abnegada por generaciones pero que poco a poco ha ido despertando y exige justicia.
Y cuidado con que despierte el México bronco, como lo dijo hace muchos años don Jesús Reyes Heroles, destacado político, jurista, historiador y académico mexicano, pues advertía que podría despertar y tomar las riendas por los errores de la clase política, y de hecho en varias ocasiones esto ha estado a punto de suceder, pero las circunstancias y el momento de ese feroz despertar no ha llegado, pero no hay que jugar con fuego.
La sociedad está harta de ser sólo testigo involuntario de tantas y tantas tropelías cometidas al amparo del poder, y como lo hemos dicho otras ocasiones, el fuero no dura para siempre y cuando se acaba, quien la debe la tiene que pagar, pero el que tantos gobernadores estén purgando sus malos actos y prácticas debería ser una llamada de atención para todos los que buscan estar en la cúspide del poder político, porque afortunadamente, como moscas, están cayendo uno tras otro en prisión.
El que decide si son merecedores de vivir tras las rejas, sin tantos privilegios acumulados durante sus mejores épocas, es el juez, pero suponemos que por lo mismo no es fácil para los políticos tener que vivir escondidos y a la sombra para no responder por sus malos actos.
Aguascalientes, desgraciadamente no es la excepción, y hay uno que otro que por ahí anda evadiendo la ley, pero si las cosas se dan como deben ser, en algún momento todos tendrán que rendir cuentas.
Pero faltan varios, políticos o no, en enfrentar la justicia, que lenta pero llega, aunque muchos no lo consideran así, pero así son las leyes mexicanas.