CIUDAD DE MÉXICO, agosto 11 (EL UNIVERSAL).- Su rostro todavía refleja el dolor provocado por la goleada sufrida en Barcelona (0-6), pero Andrés Lillini agradece que la primera oportunidad de revancha esté teñida de amarillo y azul.
El director técnico de los Pumas está convencido de que no hay mejor opción para recuperarse que ante el América, en el estadio Olímpico Universitario.
«[Será] un lindo escenario para revertir la situación y salir adelante», sentencia.
Ser ampliamente superados por los catalanes dejó una profunda herida en los universitarios y su afición, pero el argentino pide sacar provecho a la experiencia que resultó esa aventura en el viejo continente.
«Derrotas así hay, pero son circunstancias que se tienen que dejar pasar y agarrar el aprendizaje necesario», recomendó. «Un dolor tan grande como el que sentimos por esa derrota, debemos aprovecharlo y hacer bien las cosas».