La sexta ola de la pandemia del Covid-19 podría agarrar desprevenidos a los hospitales, pues ya se recurrió a la desreconversión y al menos en el caso específico del Hospital Hidalgo no hay personal, insumos ni equipo preparado para hacerle frente a un crecimiento exponencial en la demanda del servicio hospitalario por los contagios, advirtió el líder sindical de los trabajadores de la centenaria institución hospitalaria.
“Hoy no, hoy con lo que contamos de personal no, pero como hemos trabajado y con el apoyo que seguramente tendríamos habría más contrataciones para que se pueda atender”, respondió al ser interrogado si el Hospital Hidalgo pudiera hacerle frente a la nueva ola que se espera para la próxima temporada invernal.
Francisco Araiza Méndez aseguró que el Hospital Hidalgo no está en condiciones de hacerle frente a la sexta ola de contagios, debido a que el personal quedó exhausto, la plantilla está incompleta por las muertes que hubo y por el término de los contratos con el que trabajaron muchos profesionales de la salud, además al hecho de que ya se recurrió a la desreconversión de las áreas especiales para la atención de personas infectadas con estado de salud delicado.
Ante ese escenario, el secretario general del Sindicato Único de Trabajadores del Hospital Hidalgo exhortó a la población en general a seguir con la aplicación de las medidas preventivas, pues aun y cuando estén bajando los casos positivos, como ocurre en la actualidad, “se sabe que el coronavirus es traicionero y en cualquier momento pudiera llegar la sexta ola de contagios a Aguascalientes”.
“La verdad y siendo honestos, es que a como está ahorita el Hospital Hidalgo en cuanto a personal e insumos, definitivamente no estamos preparados para una nueva ola, la que sabemos que puede llegar en lo que resta del año pues viene la etapa en la que hay una mayor circulación de los virus de todo tipo”, subrayó el dirigente sindical.
En ese sentido y luego de reconocer que en el Hospital Hidalgo ya fueron eliminadas desde tiempo atrás las áreas que se destinaron exclusivamente para la atención de los casos críticos generados por la pandemia, luego que bajó de manera importante la demanda del servicio, Araiza Méndez dijo que los trabajadores de los hospitales son los que menos quieren que se vuelva a prender el problema del Covid-19 debido a lo pesado que resulta atender este tipo de enfermedades por su peligrosidad, más que por otra cosa.