Muy poco que festejar en el Día del Cartero tuvieron los empleados postales de Aguascalientes, quienes se juegan la vida todos los días, especialmente los carteros, para poder cumplir con su trabajo de entregar la correspondencia en motos y bicicletas que ya están para la basura, dado que de su propia bolsa los empleados las reparan con el fin de seguir ofreciendo el servicio a la población de la ciudad y del Estado, dijo el secretario general del Sindicato de Correos, Adrián González Cruz, quien instó a los empleados a seguir poniéndose la camiseta y al Gobierno las pilas.
Denunció el abandono en el que están los Correos en el país y en el Estado.
Destacó que se realizó una caravana convocada por la Gerencia en el Estado a la que el sindicato y la mayoría de los sindicalizados no quisieron sumarse porque es solamente para “la foto” y para aparentar que todo está bien, “y no estamos para aparentar lo que no es”.
Comentó que los empleados pasan verdaderas penurias para poder hacer su labor y que las motocicletas están en tan mal estado, que si las apagan ya no las pueden encender, y en referencia al parque vehicular, desde el 2001 no se renueva y de 4 camionetas solamente funcionan tres, porque una ya se “desbieló” y las otras van por el mismo camino.
Por otro lado, ayer se celebró una misa de acción de gracias en la Parroquia de Santa Rita de Casia y los posteriores festejos por las celebraciones del Día del Cartero se realizarán en fecha posterior, anotó el dirigente sindical, quien hizo un llamado a las autoridades federales a que se bajen de la nube y otorguen más presupuesto a esta dependencia, pues al paso que van, los carteros volverán a ser como los primeros correos prehispánicos, llamados “painani”, y volverán a usar taparrabos por la escasez de uniformes.
Lo que exigen los empleados postales es que se les dé un trato digno, tanto en la renovación del parque vehicular como de los uniformes e implementos para realizar sus labores diarias en beneficio de la población, pues el correo llega a toda la ciudad, tiene oficinas postales en diversos rumbos, además de gerencias en los municipios de Pabellón de Arteaga, Rincón de Romos y Jesús María, aparte de oficinas foráneas en Ciénega Grande, Bimbaletes y Villa Juárez, entre otras comunidades.
Por fortuna nunca ha habido desgracias personales que lamentar en el diario desempeño de los repartidores, pero todos los días “se la juegan” para poder entregar la correspondencia que aún se hace llegar a los hogares de Aguascalientes a través de las oficinas postales de la ciudad y del Estado.