CIUDAD DE MÉXICO, enero 13 (EL UNIVERSAL).- Con la inflación los precios de los alimentos fueron los que más subieron en el 2022, por ello, si hace 12 meses compraste un pollo rostizado, ahora te saldrá cuando menos 20 pesos más caro, lo que en promedio significó 20% más.
En diciembre de 2021, el precio del pollo rostizado fue de casi 101 pesos y cerró el 2022 en los 121 pesos, de acuerdo con el precio promedio nacional de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
Aunque los precios dependen de la entidad de que se trate, la Profeco dio a conocer que el precio mínimo al que se encontró en la Ciudad de México fue de 99 pesos y el más alto fue de 158 pesos por pollo rostizado.
Precio en el norte y sur del país
En la zona conurbada de Monterrey, Nuevo León, los precios están en promedio en 123 pesos, aunque el precio mínimo es de 110 y máximo de 136 pesos. Mientras que en Villahermosa, Tabasco, el precio promedio es de 199 pesos y el rango en el que están fue de 99 a 125 pesos.
Ese mismo pollo, pero crudo para rostizar comprado en centrales de abasto, se vendió en diciembre del 2022 entre los 56 y 65 pesos, de acuerdo con el Sistema Nacional de Información e Integración en Mercados Agrícola.
Un año antes, en los últimos días de diciembre de 2021 el pollo tipo rosticero crudo se vendió en las centrales de abasto del país entre los 54 pesos y 61 pesos, es decir, el cárnico subió entre dos y cuatro pesos, en los últimos 12 meses.