CIUDAD DE MÉXICO, enero 26 (EL UNIVERSAL).- Belinda ya reaccionó a la noticia que circula desde ayer, acerca de que durante un evento en el que se presentó había oficializado su relación con el empresario Gonzalo Hevia Bailléres, negando una vez más que sostengan una relación y de qué forma tan particular lo hizo, pues recurrió al muñeco «Chucky» que tiene en casa para expresar que sería él el que saldría en su defensa si se seguían inventado chismes de ella.
El fin de semana pasado, la cantante de 33 años se presentó en «Ragga by Joy Antara», un bar exclusivo ubicado en Polanco, en el que Beli cantó algunos de sus más grandes éxitos, en presencia de un pequeño grupo de personas, como lo hizo también Bad Bunny luego de ofrecer un concierto en nuestra ciudad en diciembre.
Durante el evento, «Venga la alegría» reportó que la cantante de «Esa boba niña nice» tomó la iniciativa de presentar a Gonzalo Hevia Bailléres, que se encontraba en el recinto, como su pareja, luego que, desde el mes de septiembre, época en la que se les vinculó por primera vez, negara algún vínculo amoroso con el heredero de la familia Bailléres, dueña de GNP Seguros y Palacio de Hierro.
De hecho, así como el transcurso de la noche sucedía y la cantante disfrutaba de unos tragos, a lado del empresario y un grupo de amistades, se mostró cada vez más segura de realizar muestras de afecto a su acompañante al que, por lo que ofrecen las imágenes, parece haber besado con mucha efusividad, sin embargo, la cámara que captó a Beli dando un beso, no capturó a la persona que se encontraba a su lado pero que, presumiblemente, se trataba de Gonzalo.
Por su parte, Hevia Bailléres prefirió ser más discreto, pues se dijo que luego de abandonar el bar, el empresario solicitó a los encargados del lugar que eliminaran las fotografías en las que él y Belinda aparecían juntos, para evitar que se difundieran después pues, desde que se conocieron, en la inauguración de Palacio de Hierro, sede Mítikah, han preferido ser herméticos en lo que se respecta a la relación que los une.
Sin embargo, a pocas horas de que se difundiera esta información, la cantante se puso en contacto con Ricardo Casares, colaborador de «Venga la alegría» -de acuerdo con lo que dijo esta mañana el periodista-, externándole su tristeza de que los medios de comunicación «inventen» chismes acerca de su vida personal.
Ante dicha queja -contó Casares-, le aclaró a la cantante que no se trataba de inventos, sino que el medio había difundido la información que una fuente viva presenció, pero la cantante sostuvo su versión de los hechos, asegurando que no tiene pareja, como dijo hace unas semanas a medios, al aseverar que salir con sus amigos no era sinónimo de que todos ellos fueran sus novios.
Pero la inconformidad de la intérprete de «Luz sin gravedad» no quedó ahí, pues recurrió a sus redes sociales para esclarecer cualquier duda que pudiera quedarle a sus más de 15 millones de seguidores, compartiendo una fotografía del muñeco «Chucky», uno de los personas de terror más famosos, que forma parte de su colección de monstruos.
La imagen muestra a «Chucky» con unas tijeras en la mano, acompañada de la leyenda:
Si siguen inventando chismes de Beli, me les voy a aparecer en la noche…». Más adelante, la cantante compartió otro plano del rostro de Chucky, en el que se encuentra más cercano a la cámara, con el mensaje: «Hablo en serio, no es broma…». Gonzalo Hevia Bailléres es un empresario mexicano, dueño de Lok, una consultora que trabaja con compañías que están interesadas en impulsar la tecnología, sin embargo, también es heredero de la familia Bailléres, la cual forma parte de Grupo Bal y, además, es dueña de la cadena de lujo de almacenes «Palacio de Hierro», precisamente fue en la inauguración de su nueva sucursal, ubicada en la plaza comercial Mítikah, en el evento que sugieren que él y Belinda se conocieron.
Gonzalo, además, cursó sus estudios en una prestigiosa escuela suiza, en el Instituto Le Rosey, mismo centro de estudios en el que se formaron personalidades como el rey emérito de España, Juan Carlos I, Rainero III, y la princesa heredera de Egipto, Marie-Chantal.