CULIACÁN, Sin., marzo 26 (EL UNIVERSAL).- El cuerpo de José Noriel Portillo Gil, «El Chueco», acusado del asesinato de dos sacerdotes jesuitas y un promotor turístico, en la comunidad de Cerocahui, en la sierra del vecino estado de Chihuahua, fue liberado por las autoridades judiciales de Sinaloa y entregado a su familia para su sepultura.
La tarde del jueves pasado, la Fiscalía General del Estado confirmó que estudios de genética forense practicados a dos hermanas que reclamaron su cadáver, se logró confirmar la identidad de la víctima relacionada con tres asesinatos en Chihuahua.
El sábado 18 de marzo, en un camino que comunica a los poblados de la sierra del municipio de Choix, conocidos como la Viuda y Picachos, fue encontrado su cuerpo con impactos de bala, este portaba un chaleco con cargadores, por lo que fue trasladado a una casa funeraria de la ciudad de los Mochis, en el municipio de Ahome.
Se conoce que este mediodía, el cuerpo de José Noriel Portillo Gil «El Chueco», fue liberado al concluir todos los estudios para certificar su identidad, por lo que se presume que su familia lo trasladará al estado de Chihuahua para su sepultura.
Las investigaciones abiertas contra el «Chueco», en el vecino estado de Chihuahua, donde se ofrecía una recompensa por su captura de cinco millones de pesos, se le atribuye que el día 10 de junio, en Cerocahui, Urique asesinó a dos sacerdotes y un guía de turismo.
Según los datos de estos hechos, los clérigos jesuitas, Javier Campos Morales y Joaquín Cesar Mora, intentaron auxiliar a un promotor turístico de la región, Pedro Palma, el cual era perseguido por el «Chueco», el cual privó de la vida a los tres.
La Fiscalía General del Estado de Chihuahua libró una orden de aprehensión en su contra, por lo que fuerzas federales se unieron en su búsqueda, hasta que este apareció muerto en la sierra del municipio de Choix, en el estado de Sinaloa.