CIUDAD DE MÉXICO, abril 3 (EL UNIVERSAL).-
El agresor de Heidy Infante ya está en la cárcel y tiene tres meses para que sus abogados junten las pruebas necesarias para que pueda ser liberado o de lo contrario estará más tiempo preso, tras la denuncia de abuso sexual que hizo la cantante hace algunas semanas.
Así lo informó el abogado de la artista, Víctor Rivera en entrevista con EL UNIVERSAL luego de que el cantante cubano, identificado con el nombre de Yian, golpeó y tocó los genitales de la nieta de Pedro Infante durante un concierto que se realizó en la Ciudad de México.
Fue el paso viernes, 31 de marzo, cuando detuvieron al cubano, tras haber una orden de aprehensión en un domicilio ubicado en el Estado de México, en el municipio de Ecatepec, detalló.
Al día siguiente de su captura, se llevó a cabo la audiencia en donde un juez revisó los datos y medios correspondientes «para generar la probable participación de esta persona que se le atribuye».
Fue así que Yian fue vinculado a proceso, por lo que ahora se tendrá que llevar su juicio recluido en el centro penitenciario.
«Estará ahí (en la cárcel) mientras se desahoga todo lo que es la audiencia intermedia y el plazo del cierre de la investigación, que aproximadamente son tres meses, si es que no se hace algún otro cambio.
«Durante este tiempo se puede tornar para generar una situación diferente para poder tener su libertad a través de una reparación del daño o algún otro elemento o continuar dentro del proceso hasta tener una sentencia condenatoria».
El abogado mencionó que lucharán para que el agresor de Heidy se quede más tiempo encerrado por lo que se generará la parte legal para poder tener la consecuencia y responsabilidad mayor, de acuerdo al delito que esta persona condenó.
La principal prueba fue el video que circuló en redes sociales y medio donde se ve explícitamente lo que ocurrió el día de lo ocurrido, además de los testigos de hechos que presenciaron lo ocurrido, dictámenes psicológicos y clínicos.
Pasando los tres meses será la etapa intermedia del juicio en donde se revisará la aprobación o el desahogo y el desechamiento de pruebas, mientras que esperarán hasta que se tenga fecha final de apertura del mismo juicio.
Rivera comentó que, tras dicha resolución, Heidy Infante se encuentra tranquila, pues anteriormente se encontraba con la incertidumbre o el miedo que su agresor se encontrara prófugo.
«Al tenerlo con la autoridad correspondiente ya generó tranquilidad a ella y más que con el criterio y la perspectiva de género con el juzgador fue de manera correcta, está muy tranquila, esperando y continuando con las diligencias que correspondan».