CIUDAD DE MÉXICO, junio 26 (EL UNIVERSAL).-
El aspirante presidencial Ron DeSantis lanzó este lunes un duro plan que amenaza directamente con enviar a la Guardia Costera y la Marina para bloquear la entrada a los puertos mexicanos de buques cargados con precursores químicos de las drogas.
En su Plan para Asegurar Nuestra Frontera y Detener la Invasión, DeSantis, gobernador de Florida, aseguró que si gana la presidencia, librará «una guerra contra el narcotráfico en México y en toda América Latina».
Prometió designar a los cárteles mexicanos de la droga «como Organizaciones Criminales Transnacionales y sancionaré a los cárteles, a sus líderes y a otras entidades que presten apoyo al narcotráfico».
También dijo que autorizará reglas para que, «quienes intenten introducir drogas en Estados Unidos sean recibidos con el uso de la fuerza. Ahora mismo, los operativos de los cárteles atraviesan impunemente partes del muro fronterizo y envenenan nuestras comunidades con drogas peligrosas; eso se acaba el 20 de enero de 2025».
No sólo eso. DeSantis fue más allá y advirtió que «si el gobierno mexicano no hace algo para impedir que los precursores químicos de las drogas lleguen a manos de los cárteles a través de los puertos mexicanos, enviaremos a la Guardia Costera y a la Marina».
La segunda parte de su plan tiene que ver con migración. Acusó al presiente Joe Biden no sólo de ceder «el control operativo de la frontera a los cárteles mexicanos de la droga», sino de haber abandonado su deber y permitir que «la frontera sur sea destrozada».
Aseguró que como presidente cerrará «las entradas ilegales» y construirá «el muro, de una vez por todas. Hay más de 600 millas de frontera entre Estados Unidos y México sin una barrera eficaz contra los cruces ilegales: Utilizaré todo mi poder ejecutivo y mi capital político para construir el muro».
De Santis promete garantizar la detención de migrantes que ingresen a EU
Se comprometió también a poner fin a la política de «atrapar y liberar», por la que migrantes son detenidos en Estados Unidos y luego liberados en territorio estadounidense. «Garantizaremos que los migrantes permanezcan detenidos mientras esperan la resolución de sus solicitudes, y no sean simplemente liberados en el interior del país».
Señaló que reimpondrá el Quédate en México y contratará «más agentes de la Patrulla Fronteriza y más agentes de expulsión para asegurarnos de que, aunque los inmigrantes ilegales crucen, sean rápidamente localizados y deportados».
También en el ámbito migratorio DeSantis se fue al extremo, señalando que de llegar a la presidencia, pondrá fin a «la idea de que los hijos de extranjeros ilegales tienen derecho a la ciudadanía por derecho de nacimiento si nacen en Estados Unidos. Ofrecer la ciudadanía a los futuros hijos de inmigrantes ilegales es una de las principales causas de la inmigración ilegal. También es incompatible con la interpretación original de la 14ª Enmienda, y obligaremos a los tribunales y al Congreso a abordar finalmente esta política fracasada.
«Cuando construyamos el muro, los inmigrantes no pensarán que puedan cruzarlo. Cuando contratemos a más agentes de la Patrulla Fronteriza, detendremos a los que lo intenten. Cuando intensifiquemos las expulsiones, los inmigrantes no pensarán que puedan quedarse aquí, aunque de algún modo hayan conseguido cruzar».
Incluso dijo que trabajará con países por los que atraviesan los migrantes en su camino a México y Estados Unidos, como Panamá y Colombia, para que cierren «los pasos a través de esta frontera y detener las caravanas antes de que se pongan en marcha».