Cachito, el cachorro de león que fue asegurado, no será devuelto a sus dueños, en tanto no presenten la documentación necesaria que acredite un plan de manejo y por lo pronto continuará en el refugio de animales ubicado en el Parque Rodolfo Landeros, informó la encargada de despacho de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA).
Señaló que Cachito es un ejemplar que nació con una enfermedad congénita, una malformación, misma de la que tenían conocimiento los dueños del animal, “ese león ya estaba en esas condiciones, no hay nada nuevo”.
Informó que la ley no contempla que se practique la eutanasia humanitaria, aun y cuando su médico tratante lo haya sugerido y su misma condición de salud provoca que no quiera comer bien y haya perdido peso; “el animal no tiene remedio”, manifestó la funcionaria.
La razón por la que fue asegurado fue porque los propietarios no contaban con un plan de manejo, que es un documento donde se establece el procedimiento para la atención del ejemplar, “la ley establece que los ejemplares silvestres y exóticos deben de contar con dicho documento”. La característica de silvestre corresponde a que no es una especie que está domesticada y exótico porque no se distribuye de manera natural en México, “cuando traes un ejemplar diferente al ecosistema”.
La encargada de despacho de la PROFEPA explicó que al contar con estas particularidades se requiere un documento donde se establezca el procedimiento de atención del ejemplar, las condiciones y el lugar donde se encontrará, “jaulas de manejo”, horarios, alimento y tratamientos médicos.
Y manifestó que existían irregularidades en el manejo de Cachito, ya que se encontraba en el patio de un yonke sin puerta, se desconoce si contaba con un cuarto que lo resguardara durante la noche, “con la finalidad de evitar algún problema en el que se ponga en peligro la integridad de las personas, se procedió a su aseguramiento”.