CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 14 (EL UNIVERSAL).-
César Huerta es el jugador del momento. Su buen nivel con los Pumas y su destacada participación en la Fecha FIFA con la Selección Mexicana, así lo dictan.
Su primer llamado con el Tricolor se dio gracias a Jaime Lozano y el resultado fue una grata sorpresa para todos, aunque ahora espera mantener el nivel en el Club Universidad.
«Demasiado aprendizaje. No regreso siendo el mismo jugador a como me fui. Mental y futbolísticamente rozarte con jugadores que vienen de Europa te hace crecer y tengo que ganarme mi convocatoria. Ya enfocado de nuevo en Pumas», aseveró el futbolista auriazul.
Sin dejarse llevar por la euforia o la vitrina en la que se encuentra actualmente, el «Chino» sabe que se ha convertido en una inspiración para los mexicanos que siguen en espera de ser llamados a la Selección Mexicana.
«Para mí es importante porque sirve como inspiración para muchos jóvenes. Tengo compañeros con mucha calidad y sé que no seré el único y me siento feliz porque sé que soy inspiración y abro camino en Pumas», agregó en conferencia.
El ex de Chivas reconoce que una buena actuación no significa nada y por tal motiva toma con mesura su buen momento en Pumas y en sus primeros dos partidos con el combinado nacional.
«Sé que son procesos. Cuando se habla que soy el mejor no me la creo y cuando las cosas no salen bien no me creo que soy el peor. Tengo esa mentalidad de agarrar lo bueno y lo malo desecharlo y la concentración y perseverancia cuenta a mi favor. Quiero trabajar para mostrar la mejor versión de mí», aseveró.
Respalda el trabajo de Jaime Lozano en la Selección Mexicana
El funcionamiento del Tricolor en esta Fecha FIFA no ha sido el esperado por parte de la afición mexicana. Primero igualó (2-2) ante Australia y después frente Uzbekistán (3-3), dos resultados sorpresivos, pero César Huerta pide paciencia.
«Lo comentaba después del juego de Australia, que son pequeños detalles y el proceso es trabajarlo e irte adaptando con los compañeros. No es fácil preparar un partido en tres días con jugadores que no han jugado juntos», concluyó.