La frase de “caprichos no, libros sí”, resonó ayer en la Plaza de la Patria tras la marcha que encabezaron los integrantes del Comité de Defensa de los Libros de Texto y de la Nueva Escuela Mexicana, quienes exigieron que ya se liberen los libros de texto a todas las escuelas de Aguascalientes, como es también el reclamo del sindicato de maestros y la Asociación de Padres de Familia.
Tras realizar una marcha desde el inicio de la Avenida Madero hasta la Plaza Patria, señalaron los más de 150 participantes que la educación pública está a la deriva en Aguascalientes, y que la gobernadora prometió seguir el mandato de la Constitución y el mandato de los ciudadanos, y que no está cumpliendo porque está obedeciendo a los intereses de un puñado, y “el resto, como a nosotros, a estudiantes y padres de familia, no. Por lo tanto, el pueblo tiene derecho de demandarle que cumpla”.
Por su parte, la profesora María de Jesús Rangel negó que esta marcha haya sido convocada por el SNTE a nivel local y destacó que aunque coinciden en el planteamiento, el SNTE y la AEPF difieren en los métodos, pero al final es el mismo objetivo de que los libros de texto lleguen lo más pronto posible a los planteles educativos.
Expresó que el movimiento va en progreso, pues de ser unas cuantas personas, a esta convocatoria asistieron más de 150 personas a la Plaza de la Patria, lo cual consideró un logro y en ningún momento un fracaso, y además, ahí mismo se acordó hacer un plantón el día 20 a mediodía en las instalaciones del IEA.
En la marcha estuvieron presentes los padres de familia, estudiantes, además de maestros de escuelas de varios municipios, así como integrantes del Comité, quienes señalaron que están firmes en que se entreguen ya los libros de texto.
En esta manifestación se hizo la exigencia a la gobernadora para que no sea tan insensible y libere los libros de texto, porque el daño que se le está haciendo a la educación pública en Aguascalientes es criminal, sobre todo a los niños, negándoles las herramientas de trabajo a los maestros.
Entre los que tomaron la palabra en defensa de los libros de texto estuvieron además de la profesora Rangel, los docentes María Félix Aguilera, Juan José González y María del Refugio López, aparte de padres de familia y los autores de los libros, así como le diputade Juan Carlos Ugarte y docentes de la Universidad, y todos coincidieron en que se haga la entrega de los textos y que no quieren más caprichos.