CIUDAD DE MÉXICO, octubre 29 (EL UNIVERSAL).-
Sergio Pérez aceptó que la acción, que tuvo en la curva uno en apenas la primera vuelta y que le costó chocar con Charles Leclerc para luego abandonar, fue «arriesgada», pero no se arrepiente de haberlo hecho, pues señaló que en caso de que el contacto no hubiese existido, «habría salido de la primera curva en primer lugar».
Pérez habló con la prensa. Su rostro mostraba frustración al respecto. Y es que, de tener una muy buena oportunidad de cumplir uno de sus más grandes sueños (ganar en el Hermanos Rodríguez), pasó a quedarse sin puntos, con un auto dañado y con la tristeza de la gente que acudió a la Magdalena Mixihuca a apoyarlo.
«Soy consciente que tomé un riesgo muy grande, me olvidé del campeonato, me olvidé de todo, sólo pensé en ganar aquí, en casa», dijo el 11 de Red Bull.
«Checo» aceptó que la temporada no ha sido para nada lo que se esperaba, pero aun ve amplias oportunidades en las carreras que le faltan al campeonato: Brasil, Las Vegas y Abu Dhabi.
«No ha sido una temporada ideal. Seguimos con muchas oportunidades en las tres próximas carreras y todo puede pasar», declaró.
Eso sí, no dudó en señalar que su preparación en el día a día le permitirá ir mejor en la recta final del año: «Así son las carreras, no es la primera vez que me pasa. Soy deportista, atleta, no hay más. Sé que todo mundo me matará mañana (este lunes), pero me voy tranquilo a casa, di lo mejor de mí y me voy orgulloso, de mí y del equipo que también lo dio todo».
Por último, «Checo» sentenció que todo esto, pese a no ser buenas, lo guarda como espacios a disfrutar en su carrera, pues «en algunos años más sólo serán recuerdos».