CIUDAD DE MÉXICO, octubre 29 (EL UNIVERSAL).-
A lo largo de la historia del cine, los relatos de amor se han convertido en los favoritos de los espectadores, pues muchas veces les da la esperanza de que su media naranja podría encontrarse a la vuelta de la esquina, esperando a ser encontrada.
Pero, ¿qué pasaría si esa persona tuviera una enfermedad de la que no puede curarse? ¿aun así te quedarías con ella?
Esa es la trama de «De amor y otras adicciones», una película protagonizada por Jake Gyllenhaal y Anne Hathaway y que puedes disfrutar en Netflix.
Ambientada en el año 1996, la cinta sigue la historia de Jamie Randall, un vendedor de fármacos con grandes ambiciones laborales y que no tiene reparo en utilizar cualquier trampa para conseguir sus metas. Un buen día, mientras visitaba el consultorio de un doctor, Jamie conoce a Maggie Murdock (Anne Hathaway), una hermosa mujer diagnostica con Parkinson temprano.
La atracción entre ambos es inmediata y entablan una relación pasional, pero sin ataduras, pues Maggie no está dispuesta a que la vean deteriorarse y mucho menos que alguien esté a su lado solamente por compasión, pero como suele suceder con lo asuntos del corazón, el amor les juega una mala pasada y ambos terminan perdidamente enamorados, pero con la duda de si este sentimiento será suficiente para vencer las dificultades que vienen.
A lo largo de sus 112 minutos, el director Edward Zwick dota a la cinta de elementos de humor y de drama que se presentan en dosis finamente calculadas. Hay que decir que la recepción de esta historia estuvo divida, pus mientras la crítica especializada consideró al guion como un error, elogiaron la interpretación de Hathaway.
El elenco de esta película está completado por nombres como los de Oliver Platt, Hank Azaria, Gabriel Macht, George Segal, Jill Clayburgh y Josh Gad, entre otros.
