Por Erick Cortés.- Un invierno adelantado es lo que se vive en Moscú, la capital de Rusia, donde desde el pasado 14 de noviembre se registran nevadas históricas.
Con un termómetro que en la capital llega a 20 grados bajo cero y en la región de Siberia desciende hasta los -50, el otoño de este año es inusualmente frío y el más tormentoso en un siglo.
La intensa nevada que azota a Moscú agregó este viernes cinco centímetros más al manto de nieve de medio metro que ya cubría a la capital rusa, superando el récord establecido en 1919.
A principios del mes de diciembre, otro máximo histórico se había superado, cuando cayeron más de 40 centímetros de nieve en 12 horas, algo que no ocurría en casi 150 años.
Estas condiciones han afectado el tráfico en carretera y las actividades de al menos tres aeropuertos, causando la demora de un total de 53 vuelos y la cancelación de cinco.
Las autoridades de Moscú iniciaron las labores comunales con más de 1,300 máquinas que retiran la nieve en la vía pública y esparcen reactivos para evitar la formación de hielo en las aceras.