La alta incidencia de padecimientos respiratorios que se registra en esta época entre la población hace necesario que se vuelva al uso del cubrebocas al menos por parte de los enfermos, a fin de evitar las cadenas de transmisión, la complicación de los cuadros y que los hospitales vuelvan a saturarse. “El uso del cubrebocas es recomendable sobre todo para los que tienen problemas de tipo respiratorio; no se puede generalizar su uso como ocurrió en lo más álgido de la pandemia, pero sí es conveniente que se utilice por quienes desarrollan gripe, tos u otros padecimientos como la influenza, el coronavirus o los ataques del virus sincicial respiratorio”, manifestó el doctor Rubén Galaviz Tristán. Señaló que se entró de lleno a la temporada en la que circulan más los virus de todo tipo y lo cual hace necesario que se cuide de la mejor manera posible la salud, de manera que si se llega a padecer algún problema respiratorio lo más recomendable es que se utilice el cubrebocas y que se evite acudir a sitios concurridos para evitar la dispersión de los virus. En ese sentido, el secretario de Salud del Estado advirtió que un problema respiratorio que no se atiende con oportunidad puede complicarse y llevar al hospital e incluso a la muerte, por lo que insistió en que se evite la automedicación, el avance del problema y acudir a sitios donde haya concentración de personas y falta de ventilación, pues eso terminará por generar brotes epidémicos. Ante ello, aseveró que durante esta temporada de frío es importante tomar medidas preventivas para evitar adquirir el virus sincicial respiratorio, que causa enfermedades respiratorias, especialmente entre los grupos vulnerables como niños menores de dos años de edad o personas con sistemas inmunológicos debilitados, que resultan ser los más afectados por ese virus. Precisó que el virus sincicial se transmite por el estornudo y la tos de personas infectadas, o mediante las secreciones que quedan en su ropa de cama u otros objetos, por lo que se le recomienda a la población usar cubrebocas, no saludar de beso ni de mano, recurrir al estornudo de etiqueta, lavarse las manos adecuadamente, evitar cambios bruscos de temperatura, usar ropa adecuada al clima, comer frutas ricas en vitamina C, beber abundantes líquidos y vacunarse contra la influenza. Adoptar medidas preventivas no sólo protege a las personas, sino que contribuye a mejorar la salud pública, por lo que seguir estas simples acciones evita el riesgo de una infección.