CIUDAD DE MÉXICO, enero 2 (EL UNIVERSAL).-
Han pasado casi ocho años y medio desde que Miguel Herrera, entonces entrenador de la Selección Mexicana, golpeó a Christian Martinoli, cronista de TV Azteca, en el aeropuerto de Filadelfia.
Tras la bochornosa acción, la Federación Mexicana de Futbol (FMF) tomó la decisión de despedir al Piojo, quien venía de ganar la Copa Oro 2015 con el Tricolor.
Recientemente, Toño de Valdés compartió un fragmento de la entrevista que le concedió el estratega mexicano donde reconoció que se equivocó y que «no lo volvería a hacer porque represento un ejemplo para jóvenes y niños».
«Sí me arrepiento por la posición en la que estaba y porque son las decisiones que no debes de tomar. Intenté por todos lados arreglarlo desde mucho antes y no se pudo».
El exfutbolista señaló que le faltó «frialdad» para tomar una mejor decisión y no cometer una «tontería» porque venía de conseguir un logro importante con México.
«Llega un momento en que tu cabeza está con una locura. Yo ya había advertido que en donde lo encontrara lo iba a poner en su lugar», manifestó Miguel Herrera para el canal de YouTube del periodista deportivo.