CIUDAD DE MÉXICO, enero 10 (EL UNIVERSAL).-
El desafío de las convenciones de género, con apariencias andróginas (combinación de características masculinas con femeninas en una misma identidad), pareciera algo reciente, pero uno de los primeros artista en llevar a cabo esta disrupción fue David Bowie.
El cantante irrumpió con cambios desde su actitud, su forma de moverse, de vestirse, hasta las letras de sus canciones, que trataban temáticas de liberación sexual o incluso social. Fue uno de los primeros que con un gran alcance desafió normas y convencionalidades al interior de la música y la sociedad.
Por ello, en su octavo aniversario luctuoso, recordamos al artista con los cinco momentos, más importantes de su carrera artística y de su vida personal, que definieron, marcaron o aumentaron el legado que perdura hasta nuestros días, manifestado en la identidad de género, la moda y celebraciones a su música.
5. Ziggy Stardust (1972)
La primera mitad de la década de 1970, fue fundamental para la carrera y legado de David Bowie, por la creación de su personaje Ziggy Stardust un personaje ficticio que creó Bowie para el lanzamiento de su álbum conceptual «The Rise and Fall of Ziggy Stardust an the Spiders from Mars» (1972).
Era un extraterrestre rockstar que llegó a la tierra como mensajero, a través de él Bowie exploró temas de identidad, fama, decadencia del ser humano y la autodestrucción. El disco narra la historia de Ziggy y su banda, quienes a medida que ganan fama, enfrentan una caída inevitable. Esto influyó en la moda y la cultura del momento, ya que Bowie combinó la teatralidad con la música, definiendo aún más a la cultura Glam Rock de la época.
4. Space Oddity (1975)
La canción «Space oddity», fue lanzada originalmente en el año 1969 por David Bowie, y ya daba indicios de lo que sería su exitoso álbum «Ziggy Stardust», que aborda el concepto de la exploración espacial, en esta canción Bowie habla de lo mismo, un extraterrestre que tiene problemas técnicos.
Fue inspirada por la carrera espacial de la época entre Estados Unidos y Rusia por llegar a la Luna, pero su reconocimiento fue moderado hasta que el cantante decidió relanzarla en 1975, cuando ya se había consolidado como un ícono pop, por lo que la canción alcanzó el número 1 en las listas de éxitos del Reino Unido.
La última remasterización de este tema fue en el 2015, y es la quinta canción más reproducida de Bowie en Spotify con 354 millones de reproducciones.
3. Trilogía Berlín (1977-1979)
Para el año de 1977, Bowie había decidido dar el siguiente paso, no conforme con todo lo que ya había logrado nuevamente experimentó, y ahora lo hizo junto a Brian Eno, productor británico que ha colaborado con bandas como U2, Talking Heads o Coldplay, pero en aquellos años dejó junto a Bowie la llamada Trilogía Berlín.
En esos tres discos; «Low» (1977), «Heroes» (1977) y «Lodger» (1979), Bowie hizo una transición hacia la música electrónica influenciado por Brian, donde experimentaron creando armonías con sonidos sintetizados, esta vez el concepto no estuvo en la historia, sino en la sensación coherente de continuidad que da la música entre uno y otro disco, que hacen que estén relacionados entre sí.
2. «Let’s Dance» (1983)
La experimentación que había sido una constante en la carrera de Bowie quedó atrás y se concentró en hacer un disco con sonidos más comerciales y lo logró con «Let’s Dance» cuando atravesaba una época de estabilidad y éxito persona, tras dejar atrás su adicción a las drogas, especialmente la cocaína, que se agudizó cuando realizaba la Trilogía de Berlín. No se conformó con marcar la década de 1970, sino que con los videos de este disco logró influenciar nuevamente en la moda, ahora de los años 80.
Este disco fue su retorno a la escena musical luego de que el cantante tomara medidas para sus adicciones, simbolizó su renovación y vendió 10 millones 700 mil copias, exploró géneros desde el pop, el dance, funk, lo que lo hizo conectar con nuevas generaciones.
1. El regreso y el adiós de David con «Blackstar» (2016)
Lo que para millones de personas significó un regreso, para Bowie era una despedida cuando lanzó en 2016 su disco «Blackstar», había ocultado bien su batalla contra el cáncer de hígado.
El disco fue lanzado un 8 de enero, mismo día del cumpleaños del cantante, y pareció ser su última voluntad cumplida, pues dos días después de su cumpleaños, el 10 de enero de 2016 falleció.
En él, Bowie reflexionó sobre la mortalidad y la vida, específicamente su situación personal cuando realizó el disco, además experimentó con jazz y trajo de nuevo sonidos electrónicos.