Por Erick Cortés.- El número de las mariposas monarca que llegaron a los bosques mexicanos este año disminuyó en un 59.3%. Así lo informaron la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) y el World Wildlife Fund (WWF) en un informe conjunto.
La directora general de Conservación de la Conanp, Gloria Tavera, informó que durante la segunda mitad de diciembre del 2023, sólo se registraron cuatro colonias de mariposas en Michoacán y cinco en el Estado de México, ocupando un total de 0.9 hectáreas de bosque, una cifra muy inferior a la de la temporada anterior, cuando la ocupación fue de 2.21 hectáreas.
El número de monarcas no había tenido una disminución tan significativa desde la tormenta invernal que sorprendió a México unos días antes del inicio de la primavera del 2016, lo que acabó con dos terceras partes de las mariposas. Y la ocupación en los bosques no había sido tan baja desde la temporada 2013-2014, cuando habitaron sólo 0.62 hectáreas.
Los expertos señalan que la disminución se debe principalmente a los cambios climáticos que se han presentado en su ruta migratoria, a la sequía que afecta a México y algunas regiones de Canadá desde hace varios meses, así como el incremento de las temperaturas, la deforestación, el cambio de uso de suelo y el uso de herbicidas y pesticidas. Todos estos factores se traducen en una menor disponibilidad de asclepias (las plantas donde las mariposas depositan sus huevos y se alimentan sus larvas).
Humberto Adán Peña Fuentes, coordinador del informe, destacó la necesidad urgente de abordar el cambio climático como una amenaza para la reproducción y migración de la mariposa monarca. “Vamos a tomar acciones en este corredor para prevenir el cambio de uso de suelo y el uso de agroquímicos tóxicos, particualrmente glifosato y otros que según la ciencia también están afectando el medio ambiente”, aseguró.
Por su parte, investigador canadiense, Gregory Mitchell, pidió que los tres países unan esfuerzos para garantizar la conservación de la especie. “Tenemos mucho conocimiento y evidencia para comenzar a tomar acciones de conservación y comenzar a revertir la disminución de la monarca”, dijo.
La monarca fue incluída en el 2022 en la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. Por esta razón, sus santuarios son áreas naturales protegidas, aunque en México son vulnerables a sufrir la tala clandestina, una actividad que causa la pérdida de unas 100 mil hectáreas de bosque cada año, lo que representa uno de los principales retos para el gobierno mexicano.