Por Erick Cortés.- Para todos es bien sabido que el hábito de fumar incrementa las posibilidades de padecer muchas enfermedades crónicas degenerativas, pero un nuevo estudio publicado en la revista Nature ha revelado que fumar tabaco también debilita el sistema inmunológico y vuelve a las personas más vulnerables a enfermedades infecciosas, incluso años después de dejar el cigarro.
Por esta razón, y aunque la tasa de tabaquismo ha disminuido notoriamente en las últimas décadas, las complicaciones asociadas con el hábito de fumar siguen siendo la principal causa de muerte “evitable” en los Estados Unidos, provocando más de 480,000 muertes cada año.
El estudio, dirigido por la doctora Violaine Saint-André, especialista en biología computacional del Instituto Pasteur de París, enfatiza la necesidad urgente de dejar de fumar para preservar la salud inmunológica.
Durante la investigación, se analizaron muestras de sangre de un grupo integrado por 1,000 personas sanas (500 hombres y 500 mujeres) de entre 20 y 69 años, demostrando que los más fumadores presentaban un mayor desgaste de su respuesta inmune. Así lo explicó Saint-André: «Nuestro principal descubrimiento es que fumar tiene efectos a corto, pero también a largo plazo, sobre la inmunidad adaptativa asociada con las células B y las células T reguladoras, y con cambios epigenéticos”.
Y es que el estudio no sólo dejó claro que, cuanto más fuma una persona, más se afecta su sistema inmune, sino que el daño continúa aún después de dejar el hábito, pues cuando el grupo de fumadores que participaron en el estudio dejaron de consumir tabaco, su respuesta inmunitaria se vio mejorada, pero no se recuperó por completo durante años.
Al respecto, el doctor Darragh Duffy, coautor del estudio, destacó que el hecho de que la salud inmune tarde en restablecerse no debería ser una causa de desmotivación para quienes desean abandonar el hábito, sino una motivación para dejarlo cuanto antes: “Nunca es un buen momento para empezar a fumar, pero si eres fumador, el mejor momento para dejar de fumar es ahora”, dijo.
Varios expertos de la comunidad científica opinaron sobre los descubrimientos del experimento. Por ejemplo, el doctor Albert Rizzo, de la Asociación Médica Estadounidense, destacó que el estudio permite comprender mejor por qué los ex fumadores son más propensos a desarrollar EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica), y otros expertos coinciden en que el estudio proporciona una comprensión más profunda de los riesgos asociados con el tabaquismo, además de mostrar la importancia de desarrollar políticas de salud pública que desalienten el hábito en las nuevas generaciones.