Nueva York, 21 feb (EFE).
El fabricante de aviones estadounidense Boing anunció este miércoles la salida del responsable de los aviones 737 Max, Ed Clark, mes y medio después del incidente en el que uno de los aparatos, operado por Alaska Airlines, perdiera parte del fuselaje en pleno vuelo.
El jefe ejecutivo de la unidad de aviones comerciales de Boeing, Stan Deal, indicó en una nota a los empleados que Clark deja la empresa tras haber asumido la división de los 737 Max en 2021, última etapa de una carrera de 18 años ligada a ese aparato.
Clark, que hasta ahora también era director general de la fábrica de Boeing en Renton (Washington), donde se produce el 737 Max, será sustituido en ambas funciones por Katie Ringgold, que era la supervisora de las entregas de este modelo a los clientes.
Boeing anunció más cambios en su cuadro directivo, incluyendo la creación de un nuevo puesto de control de calidad en la unidad de aviones comerciales, que ocupará Elizabeth Lund, una veterana ejecutiva.
El informe preliminar de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) concluyó que el Boeing 737 Max 9 de Alaska Airlines que tuvo problemas el 5 de enero carecía de cuatro tornillos justo en el panel que se desprendió cuando volaba con 117 personas a bordo.
Eso forzó su aterrizaje de emergencia en Portland (Oregón, EE.UU.) poco después de haber despegado, según un informe preliminar, pero no hubo que lamentar víctimas.
Debido al incidente con el avión de Alaska Airlines, la Administración Federal de Aviación estadounidense (FAA, en inglés) ordenó el 6 de enero la inmovilización de todos los Boeing 737, que a veinte días después fueron saliendo progresivamente de la ‘cuarentena’ y regresaron al aire.
La FAA ya se había comprometido hace cinco años a aumentar la supervisión sobre Boeing tras los dos accidentes mortales en 2018 y 2019 en los que se vieron involucrados también aparatos 737 Max, y que dieron paso a la mayor crisis en la historia de la compañía.
El fabricante aeronáutico acumula cinco años con pérdidas, primero debido a la crisis de los 737 Max y luego por la situación económica derivada de la pandemia.