Por Erick Cortés.- Cada vez es menos difícil encontrar, en nuestro círculo cercano, a alguien que padece cáncer. Un mal que hace varios años era poco común, hoy es frecuente de encontrar incluso en grandes personalidades, como la cantante Cat Janice y el rey Carlos III de Inglaterra.
En un informe publicado en el mes de febrero, la Organización Mundial de la Salud advirtió al mundo sobre un acelerado incremento de los casos de cáncer. Según sus estimaciones, en el último año se contaron 20 millones de casos activos y se espera que la cifra aumente un 77% en el 2050, superando los 35 millones.
Los datos analizados incluyen a 185 países y 36 tipos diferentes de cáncer, de los cuales, el de pulmón fue el más común y el más mortífero, seguido por el cáncer de mama, el colorrectal, de próstata y de estómago.
“Hay una serie de determinantes que han hecho que el cáncer se incremente. Muchos de los cánceres tienen precursores genéticos específicos; así que, si una persona tiene un precursor genético, su posibilidad de heredarlo es alto”, explica Alma Ortiz, subdirectora de la Asociación Mexicana de Lucha Contra el Cáncer.
La pobreza como principal factor
Los datos del informe revelaron una relación existente entre la mortalidad por cáncer y la calidad de vida que ofrecen los países. Por ejemplo, la tasa de mortalidad por cáncer de mama fue de una muerte por cada 71 casos detectados en los países más desarrollados, mientras que en los países con menos recursos una de cada 48 mujeres diagnosticadas perdieron la vida. Estas cifras evidencian una brecha en los servicios de salud a nivel mundial, marcada por un desigual acceso a los tratamientos oncológicos como la radiación y los trasplantes de células madre, mismos que, en algunos países son poco accesibles o no existen.
“Desafortunadamente, en México sigue siendo poco accesible a la población, porque es costoso, desde hacerse el testeo para saber si tienes un cáncer o algún precursor genético, hasta el tratamiento, que también es inaccesible para la población general”, asegura Alma.
Además de la poca cobertura de los servicios médicos, quienes viven en comunidades marginadas a menudo se enfrentan a factores ambientales, como la contaminación del aire, el agua y el suelo; además de ser más propensos a la malnutrición.
“El cáncer se da más en poblaciones que son pobres y tiene que ver con la alimentación y con otro tipo de factores. En poblaciones como Durango —un estado minero—, hay contaminación del aire y el agua, lo que ha incrementado los casos de leucemia significativamente en gente que vive en zonas rurales de bajos recursos, quienes además de tener una mala alimentación, también tienen otros factores dentro de su entorno que contribuyen al incremento del cáncer”.
Las principales causas de muerte en México
En México, como en el resto del mundo, el cáncer de mama sigue siendo la primera causa de muerte por tumor maligno en mujeres, una cifra que no ha disminuido a pesar de las insistentes campañas que se han hecho para concientizar sobre su diagnóstico oportuno, pues la mayoría de la población aún no tiene la posibilidad de acudir a un centro de detección.
“No tenemos suficientes centros en México para el diagnóstico que sean gratuitos para la población. Y lo mismo ocurre con el cáncer de próstata. Esto está ocurriendo en todos lados”.
Por otra parte, los malos hábitos como el tabaquismo siguen siendo uno de los factores de riesgo más importantes. El hábito de fumar ha estado relacionado con el 22% de las muertes por cáncer que se dan cada año en los Estados Unidos, algo que quedó demostrado entre el año 1991 y el 2021, cuando las muertes por esta enfermedad disminuyeron junto con el consumo de tabaco entre los adultos jóvenes. Sin embargo, este grupo ha sido más vulnerable a otros tipos de cáncer, como el colorrectal, más asociado a los malos hábitos alimenticios.
Así lo explica Alma Ortiz: “En el caso de México, el cáncer colorrectal se ha convertido en la primera causa de muerte en general por tumor maligno, y esto se debe a la mala alimentación. Las personas, escucharás frecuentemente, que hablan de que tienen gastritis o colitis, y eso está directamente relacionado con cómo nos alimentamos. Tenemos también el cáncer de hígado, que es frecuente en personas que desarrollan primero hígado graso y después fibrosis”.
Otro de los factores desatendidos es la medicina preventiva, pues es muy poco frecuente que las personas acudan a un chequeo médico regularmente para verificar su estado de salud y descartar cualquier patología importante. “No nos estamos checando. La gente no piensa que puede padecer un cáncer, pero debemos de tener conciencia de que ninguno de nosotros está exento, ni siquiera un joven. Hoy la leucemia es la causa número uno de muerte entre niños de cero hasta jóvenes de 29 años”.
La concientización como principal herramienta de cambio
Tras la publicación del informe, la OMS urgió a los gobiernos a implementar medidas para garantizar la atención del cáncer, trabajar para disminuir los factores de riesgo y promover su prevención y detección temprana. Sin embargo, diversas organizaciones, como la Asociación Mexicana de Lucha Contra el Cáncer, han sido conscientes de esta necesidad desde hace tiempo, por lo que han realizado labores de atención, concientización y educación para fomentar su prevención.
“La asociación ha entendido muy bien este camino y ha dividido sus intervenciones en varios pilares: el primero tiene que ver con la concientización y la educación de las personas, de quienes viven con cáncer, sus familiares y cuidadores. También educamos a los médicos de primer contacto para que siempre busquen la detección del cáncer, que lo investiguen y lo indaguen en sus pacientes; y con colegios médicos de especialidad trabajamos con el tema de diagnóstico oportuno, sabemos que si incentivamos el diagnóstico muchas personas salvarán su vida”, cuenta Alma.
Gracias a los donativos y al voluntariado, la AMLCC también brinda apoyo médico, económico y hasta psicológico a los pacientes que lo requieren. “Otorgamos a pacientes de alta vulnerabilidad insumos para la salud, los apoyamos, algunas veces, con medicamentos; a las mujeres mastectomizadas las apoyamos con prótesis, pelucas, entre otras cosas; brindamos a los pacientes y a sus familiares un apoyo psicológico y tanatológico en caso de que lo requieran, y también ayudamos a los pacientes con sus traslados cuando no cuentan con la posibilidad de trasladarse a un centro de concentración para cáncer”.
Quienes deseen contactar a la asociación mexicana de lucha contra el cáncer pueden hacerlo a través de las redes sociales y en el sitio web amlcc.org/
Si bien la predisposición genética, el ritmo acelerado de la vida moderna y la alimentación de baja calidad son los principales factores del incremento de los casos de cáncer en el mundo, es el desconocimiento sobre este padecimiento lo que termina influyendo más en su aparición. Por ello, se vuelve necesario informar a la población sobre los cambios que deben tomar en su estilo de vida si desean reducir el riesgo de padecer esta mortal enfermedad, como hacer más ejercicio, fumar menos, sustituir los carbohidratos refinados por una dieta más equilibrada y realizar con regularidad los exámenes de detección temprana podrían hacer la diferencia.