Como un error de primaria calificó el secretario de Seguridad Pública Municipal, Antonio Martínez Romo, el que una detenida haya intentado acabar con su vida en las instalaciones de la Fiscalía, atribuyendo dicha situación a los protocolos tan lentos en el Ministerio Público, pues si los acusados fueran de inmediato presentados ante el área de detención pertinente, no habría oportunidad para que saltaran por las ventanas como sucedió con esta persona. Al respecto, mencionó que el actuar de los policías municipales que llevaron a la detenida fue el correcto, el problema, dijo, fue al momento de que dicha persona fuera recibida, pues no se hizo de forma inmediata, lo que se prestó a que se diera este intento de suicidio. “El protocolo en el tema de la conducción del elemento fue como está marcado. Al llegar a las instalaciones creo que debería de ser recibido de manera inmediata y presentado ante el área de detención pertinente y que tenga todas las medidas de seguridad para que el elemento pueda hacer la puesta a disposición”. Martínez Romo explicó que “cuando iban subiendo hacia el área de robos, en el primer nivel, la persona en un cierto momento como la iban conduciendo, forcejea, hace una maniobra extraña, se pega hacia el barandal del edificio y provoca que caiga”. Comentó que en el caso de Justicia Municipal, ni siquiera hay ventanas cerca como para que los detenidos tengan la oportunidad de salir o arrojarse por las mismas. “El diseño de Justicia Municipal es diferente, queda siempre bajo conducción del oficial, hay custodios que siempre están pendientes de ellos y el diseño que tiene ese edificio está para que no pueda ser alcanzado una ventana o algo así”, concluyó.