El licenciado Juan José Shaadi Rodríguez rompió el silencio sobre su abrupta separación de la Secretaría General de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, tras asegurar que tomó esa decisión por “discrepancias irreconciliables en la visión de Universidad” y por la forma en la que está siendo manejada la Máxima Casa de Estudios de Aguascalientes, aunque también rechazó haber conspirado contra las autoridades universitarias.
Luego de que en “círculos universitarios” se manejó la versión de que fue cesado del cargo por no prestarse presuntamente a encubrir a quienes tuvieron participación en la llamada Estafa Ponzi, Shaadi dejó en claro que fueron otros y no ese el motivo de haber renunciado al cargo que venía desempeñando desde el 1 de enero del 2023.
En un texto dirigido a la “Querida Comunidad Universitaria”, al H. Consejo Universitario y a la Honorable Junta de Gobierno, copia del cual hizo llegar también a HIDROCÁLIDO, el ex-secretario general de la UAA rechazó de manera categórica cualquier señalamiento de conspiración contra la rectora de la UAA.
“Niego cualquier intento por crear, coordinar o pertenecer a un conciliábulo que pusiera ‘trampas´ o que urdiera estrategias para lastimar a nuestra Institución. Al contrario, me desempeñé hasta el último día con la firme convicción de velar por la Autónoma de Aguascalientes y trabajar con y para su rectora”.
En el documento que elaboró para atajar los rumores que se levantaron después de su sorpresiva renuncia al importante cargo que desempeñó en la Autónoma por más de un año, Shaadi Rodríguez refirió que “…deseo comunicar a mis compañeros universitarios las razones que alcanzo a dilucidar, que orillaron mi salida del cargo, en el que me venía desempeñando desde el 1 de enero de 2023, las cuales, considero fundamentalmente fueron: discrepancias irreconciliables en la visión de Universidad; con calidad en el ingreso, de excelencia en el egreso, plural, de puertas siempre abiertas para todos y todas, austera, incluyente, respetuosa, verdaderamente humanista y dignificante, con reconocimiento a la labor docente y revalorización al trabajo de los investigadores, de respeto y aprecio por el trabajo administrativo, de certeza laboral para todas y todos, libre de todo tipo de violencia. Visión que no tuvo eco suficiente, pese a mi reiterada insistencia. Por el contrario, lo atribuyo como las causas que ocasionaron solicitarme dejar la Secretaría”.
De la misma manera rechazó las versiones que apelan al desprestigio del proyecto educativo, social, cultural y deportivo más importante del Estado, negando al mismo tiempo la versión que indica que se le ordenó y consecuentemente se negó a firmar una reinversión de recursos universitarios, “lo cual no se encuentra dentro de las facultades del secretario general y de las cuales en ningún momento participé”, deslindándose con ello de haber tenido participación alguna en el caso que le provocó un “descalabro” financiero muy importante a la UAA.