La Corte Internacional de Justicia (CIJ), órgano judicial de las Naciones Unidas, notificó de la recepción de la demanda interpuesta por México contra Ecuador, a raíz de la irrupción de las fuerzas de seguridad ecuatorianas en la embajada mexicana en Quito.
En un comunicado de prensa, la CIJ informó que «México ha presentado hoy una solicitud de apertura de procedimiento contra Ecuador» en relación con la solución de disputas internacionales a través de medios pacíficos, así como sobre la inviolabilidad de una misión diplomática.
La demanda está relacionada con la irrupción, el pasado 5 de abril, de las fuerzas ecuatorianas a la legación diplomática mexicana para sacar y detener al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, quien se encontraba refugiado en la embajada y a quien México concedió asilo diplomático, después de que Glas declarara ser víctima de persecución política, tras ser señalado de peculado.
Ecuador afirma que el asilo no procede por tratarse de delitos del fuero común.
En el comunicado, la CIJ, compuesta por 15 jueces, señala que México denunció que lo ocurrido el 5 de abril no es un incidente aislado, sino la culminación de «una serie de actos de intimidación y acoso» por parte del gobierno ecuatoriano.
Como había informado antes el presidente Andrés Manuel López Obrador, la CIJ señala que México está solicitando a la corte «la reparación total del daño» y la «suspensión de Ecuador como miembro de Naciones Unidas», en vista de la violación de las leyes internacionales.
Asimismo, indica la CIJ, México solicita la implementación de una serie de medidas provisionales, mientras la Corte llega a una definición sobre el caso.
Dichas medidas son:
Que el gobierno de Ecuador tome las medidas apropiadas e inmediatas para brindar plena protección y seguridad de las sedes diplomáticas, sus bienes y archivos, impidiendo cualquier forma de intrusión contra los mismos.
Que el gobierno de Ecuador permita al de México desalojar las instalaciones diplomáticas y la residencia privada de los agentes diplomáticos.
Que Ecuador garantice que no se tomarán acciones que puedan perjudicar los derechos de México respecto de cualquier decisión que la Corte pueda dictar sobre el fondo de la controversia.
Que Ecuador se abstenga de cualquier acción o conducta que pueda agravar o ampliar la disputa ante la Corte.
