El secretario de Salud, Rubén Galaviz Tristán, pidió a la población extremar precauciones para evitar el golpe de calor a causa de las altas temperaturas que se registran en la Entidad, pues advirtió que este problema puede derivar en la muerte de la persona si no se le trata adecuadamente y de manera oportuna.
Luego de confirmar que hasta la víspera se tenían notificados cuatro casos de golpe de calor, ocurridos principalmente en menores de edad de los municipios de Aguascalientes, Calvillo y Rincón de Romos, que son los que han registrado las temperaturas más elevadas a causa de lo que es la segunda ola de calor, el responsable del Sistema Estatal de Salud señaló que el golpe de calor resulta ser extremadamente peligroso puesto que incluso puede llevar a tener una muerte súbita.
“La persona con golpe de calor puede morir si el problema de salud no se trata adecuadamente y de inmediato, puesto que puede provocar un choque hipovolémico en el organismo, por lo que lo más recomendable es no exponerse por períodos prolongados a la intensidad de los rayos solares”, subrayó el funcionario estatal.
Explicó que el golpe de calor se distingue porque provoca desde deshidratación y hasta la pérdida de la memoria, así como otros síntomas que se deben atender de inmediato para evitar que el caso se agudice y pueda llegar a la muerte de la persona.
Cuestionado sobre la sintomatología que presenta quien llega a padecer el llamado golpe de calor, el doctor Galaviz expuso que: “Primero vamos a tener datos de deshidratación, boca seca, lagrimal con escasa lágrima, ojos hundidos, la piel seca y quebradiza, una pérdida paulatina de relación con el medio ambiente, van a tener incluso alucinaciones o pérdida de la realidad y además puede haber náusea, puede haber vómito, dolor de cabeza intenso y la piel empieza a tener un problema de trasudación, ya que a pesar de que están deshidratados empieza a haber un problema de piel fría, siendo por ello que la atención es de urgencia médica inmediata”.
Por otro lado, el titular de Salud dijo que a través de la Dirección de Regulación Sanitaria se reforzó la vigilancia en los alimentos, bebidas y en el agua que se utiliza en los puestos de la zona ferial, a fin de exigir la sanidad y el cumplimiento de las disposiciones de la materia, precisamente para evitar las infecciones por el consumo de alimentos en mal estado.
Como parte de la estrategia se está monitoreando el agua tanto para el uso de la preparación de los alimentos como del drenaje con el propósito de identificar con oportunidad la posible presencia de la bacteria del cólera, sin que hasta el momento se tengan resultados que indiquen riesgo alguno en ese sentido.