Trump Media, la empresa de Donald Trump que engloba su red social Truth Social, ha perdido en torno al 30 % de su valor en bolsa desde que debutó hace un mes en el índice Nasdaq, sujeta al vaivén de los especuladores y de la situación judicial del expresidente.
Trump Media & Technology Group (TMTG), su nombre completo, salió al mercado el 26 de marzo al fusionarse con Digital World Acquisition Corp., una sociedad instrumental cuyo único propósito sacar a bolsa a otra empresa, conocida como «spac», e inicialmente la operación fue un éxito.
La «spac» pasó de valer menos de 50 dólares por acción el día anterior al debut a dispararse en la apertura siguiente hasta los 70 dólares, ya fusionada con TMTG y llevando las iniciales de Trump como etiqueta; después hubo unas horas de locura bursátil en las que alcanzó un pico de 79 dólares.
Fue una buena noticia para Trump, el accionista mayoritario con una participación en torno al 60 %, aunque una cláusula le impide vender acciones hasta septiembre y eso significa que su patrimonio está ligado a la marcha de la cotizada y ese dinero está bloqueado en un momento en que necesita liquidez.
No obstante, los fundamentos financieros que TMTG ha divulgado hasta ahora, y en los que se fijan analistas e inversores, pintan una imagen nada halagüeña: pérdidas de 58 millones de dólares en 2023, previsiones de números rojos en el futuro y el reconocimiento de unos débiles controles internos.
Esa situación ha hecho a TMTG atractiva para los especuladores conocidos como ‘short-sellers’, fondos o individuos ‘bajistas’, que ganan dinero apostando por la caída de una cotizada y han popularizado el concepto de «acción meme» que se aplica a títulos volátiles como GameStop o AMC.
Tras empezar el inédito juicio penal contra Trump en Nueva York, las acciones de la firma cayeron un 15 %, y recortaron otro 10 % tras divulgar sus planes de dedicarse a la televisión en «streaming», aunque las fuertes oscilaciones a uno y otro lado son la tónica y lo raro es una jornada tranquila.
Dinero y política van de la mano
En todo caso, la expectación por la salida a bolsa que propulsó las acciones parece haber dado paso a actores del mercado más interesados en el dinero que en la política, y que están dando quebraderos de cabeza a la dirección ejecutiva de TMTG.
El consejero delegado de la empresa, Devin Nunes, un antiguo cargo del Partido Republicano, ha pedido ayuda a los directivos del índice Nasdaq por lo que considera «manipulación» bursátil, acusando a cuatro firmas de acaparar el 60 % de su volumen de negociación, entre ellas el fondo de riesgo Citadel.
Citadel ha asegurado que sigue la ley y llamado a Nunes «perdedor proverbial», un lenguaje que revela una historia de trasfondo: el jefe de la entidad, Ken Griffith, apoyó la campaña de Nunes al Congreso antes de que este la dejara por Trump Media, y también apoyó a Nikki Haley, exrival de Trump por la Casa Blanca.
Rencillas políticas y especulación bursátil aparte, Trump Media cierra su primer mes con la acción por encima de 40 dólares y una capitalización de 5.770 millones, un punto medio entre el pico inicial de 70 dólares y el punto de 22 dólares en que tocó fondo tras iniciarse el juicio penal.
La última semana ha sido positiva para ‘DJT’ y para el portador de esas iniciales, puesto que se ha mantenido por encima de un mínimo acordado en los trámites de salida a bolsa para que el expresidente obtuviera un «bonus» de millones de títulos que amplían su potencial botín.
Trump afronta cuantiosas multas tras los juicios por fraude contra la Organización Trump y por difamación contra la escritora E. Jean Carroll, así como gastos para otros procesos, sin olvidar su campaña como principal candidato republicano a la Casa Blanca.