El ministro de Exteriores egipcio, Sameh Shukri, habló este viernes con sus homólogos de Francia y Reino Unido, Stéphane Sejourné y David Cameron, para avisar de los «peligros de la escalda» en Gaza, en especial en Rafah, que calificó como «destructiva» para los esfuerzos para una tregua en la franja.
Shukri, cuyo país es mediador clave entre Israel y Hamás, «advirtió contra las consecuencias de la continuación de la actual situación en Rafah», en el sur de Gaza y fronteriza con Egipto, bajo operaciones militares israelíes desde hace días, informó el Ministerio de Exteriores egipcios en sendos comunicados.
El egipcio advirtió asimismo, en sus llamadas telefónicas con Sejourné y Cameron, contra «la tendencia hacia una mayor escalada», que consideró como «una nueva demolición de los esfuerzos por alcanzar una tregua» en Gaza.
Si bien «destacó el compromiso y la voluntad de Egipto de continuar su papel de mediación», enfatizó que «el asunto requiere que todas las partes asuman su responsabilidad, proporcionen voluntad política y pongan fin a las políticas provocadoras y escalantes».
En su conversación telefónica con Cameron, Shukri «subrayó la necesidad de presionar a Israel para que cumpla con sus obligaciones como potencia ocupante y detenga sus políticas sistemáticas para crear una realidad deshabitada en Gaza», añadió Exteriores egipcio.
El titular de Exteriores egipcio expresó una postura similar en una conversación que mantuvo anoche con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en la que ambos instaron a Israel y Hamás a «mostrar flexibilidad» para alcanzar un acuerdo de tregua que permita intercambiar rehenes por presos e ingresar ayuda a los civiles en Gaza.
Esos contactos diplomáticos egipcios se producen después del fin, este jueves, sin éxito, de una ronda de negociaciones indirectas de dos días en El Cairo entre Hamás e Israel para una tregua en Gaza, con la mediación de Egipto, Catar y Estados Unidos.
Hamás anunció el lunes pasado que acepta la última propuesta ofrecida por los mediadores, mientras que Israel expresó reservas sobre ella.
La última ronda negociaciones de El Cairo coincidió con la operación militar iniciada el lunes pasado por Israel en Rafah, en la que Israel tomó el control del lado palestino del cruce de esa ciudad, y donde al menos 60 palestinos se sumaron a los ya cerca de 35.000 que perdieron la vida en los siete meses de guerra.