La conductora de televisión Mariana Echeverría cuenta que heredó su amor por el América por herencia de su padre, que el mismo día que ella llegó al mundo, celebraba el triunfo del equipo azulcrema contra las Chivas, motivo por el que estaba decidido a llamarla como el equipo de fútbol, pero su madre no se lo permitió.
La conductora de «Me caigo de risa» fue entrevistada por Yordi Rosado este domingo, en una divertida conversación donde rememoró sus primeros años de vida, en los que creció a lado de sus tres hermanos.
Echeverría, conocida por su gran pasión por el fútbol, aseguró que fue un gusto que desarrolló desde que nació, debido a que su papá es un gran aficionado de las Águilas del América.
Curiosamente, rememoró que el día de su nacimiento, el 10 de junio de 1984, se batió la final entre América y Chivas y, mientras su madre daba a luz, su padre estaba afuera de la sala de hospital, enfocando su atención en la televisión donde se emitía el juego.
Su progenitor celebró el triunfo del América, que se batió el triunfo con tres goles -frente a un gol de Chivas- y, su euforia fue tal, que al entrar a la habitación donde vio nacer a Mariana, le expresó a su esposa sus deseos de llamarla como el equipo de fútbol, situación que a la irritó, de acuerdo con las declaraciones de la conductora.
«Mi papá me quiso poner ´América´, o sea nací y mi papá, en vez de estar viendo el parto, estaba fuera viendo el partido América vs Chivas, un ojo en el gato y el otro garabato, entonces entró al cuarto y dijo: ´Se va a llamar América porque ganó el América ahorita´, pero mi mamá me defendió a capa y espada, sí era una locura», relató.
También dijo que desde que era una niña solía llevarla a ver los partidos al Estadio Azteca:
«Desde chiquita, mi papá me llevaba al Estadio, era una pequeña, pero ahí estaba en el Estadio, con mis palomitas, viendo el fútbol».
Su amor al fútbol no fue lo único que Mariana le heredó, pues asegura que tiene su mismo carácter, situación que los lleva a discutir con mucha frecuencia.
«Con mi papá me peleo muchísimo, tenemos como que el mismo carácter y chocamos mucho, pero es al primero al que le llamo para todo, si me dicen ´contacto de emergencia´, pongo a mi papá, si me van a ofrecer un proyecto y dudo es al primero al que le habló», destacó.
La presentadora de TV no sólo encontró gusto ver el fútbol, sino que, desde muy chica practicó diferentes deportes, como taekwondo, práctica en que se desempeñó en juegos olímpicos juveniles, también probó basquetbol, futbol y voleibol playero.
«Toda mi infancia hice deporte», destacó.
En esa época, nunca se hubiera imaginado que, en su adultez, se enamoraría de un jugador de fútbol y, para colmo, que fuera americanista.
De hecho, ella y su esposo, el arquero Óscar Jiménez se conocieron por las redes sociales y, mientras se escribían, apostaron por un juego entre el Barcelona y el Real Madrid; ella perdió y tuvo que invitar una cena. A raíz de ese momento, la pareja nunca dejó de estar juntas, pues sus salidas comenzaron a ser más frecuentes.
Destacó que, si su esposo es llamado a unirse a las filas de otro equipo de fútbol, con todo el dolor de su corazón, se volverá aficionada del equipo donde trabaje, pues para ella es prioridad apoyarlo en todos sus logros.
«Estoy en el plan de que puede ser de cualquier equipo, yo siempre he dicho ´primero lo que deja´, entonces el día que se cambie de equipo, me voy a tener que cambiar la playera, lo tendré que apoyar a él, ya va más allá de mi amor por el fútbol, va más allá el amor a mi esposo, si se va a Chivas o a Pumas, me voy a poner orgullosa la playera», precisó.