Por Erick Cortés.- La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) ha pronosticado una temporada de huracanes más intensa de lo normal para el año 2024, con la formación de entre 17 y 25 tormentas en el Atlántico, de las cuales hasta siete podrían convertirse en huracanes potencialmente peligrosos.
El pronóstico obedece a la presencia del fenómeno conocido como “La Niña”, que reduce la velocidad del viento en el Atlántico, favoreciendo la formación y el fortalecimiento de los ciclones tropicales; así como al incremento de la temperatura del mar, que en el último año ha batido récords al registrar una temperatura promedio de 25 grados centígrados, valores que son anormales en la región, según los Centros Nacionales de Información Ambiental de la NOAA.
Estas condiciones elevan la probabilidad de que se de un número alto de tormentas y ciclones intensos, lo que eleva las alertas en los habitantes de las áreas costeras y las regiones cercanas al mar Caribe.
Tras observar el poder del huracán Otis, que azotó a Acapulco en octubre del 2023; y de Ían, en 2022, las autoridades de los Estados Unidos han alertado que los huracanes poderosos se están volviendo cada vez más frecuentes. Por ello, Rick Spinrad, administrador de la NOAA ha advertido que “la temporada de huracanes 2024 podría ser una de las más activas registradas debido a las condiciones actuales del océano y la atmósfera», por lo que pidió a la población tomar precauciones con anticipación.
La temporada de huracanes inició oficialmente el pasado 1 de junio, y se extenderá hasta el 30 de noviembre.
Ante ello, las autoridades han emitido una serie de recomendaciones para quienes viven en zonas vulnerables a los huracanes dentro y fuera de los Estados Unidos, que incluyen la elaboración de kits de emergencia con agua, alimentos no perecederos, medicinas, linternas y baterías; seguir las actualizaciones meteorológicas y estar atentos a las órdenes de evacuación emitidas por las autoridades locales.