Un día después de convertirse en Berlín en campeona de Europa por cuarta vez en su historia, la selección española de fútbol se dio un baño de gloria por las calles de Madrid, con un multitudinario recibimiento por parte de decenas de miles de aficionados en la Plaza de Cibeles como colofón.
Un escenario situado a los pies del Palacio de Comunicaciones, sede del ayuntamiento de la capital de España, fue el punto final del recorrido de los internacionales después de una intensa jornada; y al mismo tiempo el lugar de partida de una fiesta donde quedó claramente escenificada la comunión entre el equipo y los seguidores.
El nexo de unión entre unos y otros fue sin duda el capitán Álvaro Morata, indiscutible maestro de ceremonias. El delantero asomó el primero en escena con el trofeo en la mano y acto seguido cambió este por el micrófono para ir presentando uno a uno a todos sus compañeros, por orden numérico y cada uno asociado a su canción preferida; mezclando en el proceso guiños personales en clave humorística y alabanzas a partes iguales.
Así, todo empezó por ‘Spiderman’ David Raya y por el ‘jabalí’ y el ‘pitbull’ Dani Carvajal, a quien definió como «el mejor lateral derecho del mundo» tras preguntarse «¿dónde está Musiala?». De Robin Le Normand apuntó que es la «pesadilla de todos los delanteros de Europa»; de Nacho Fernández que «puede saltar tres metros de cabeza»; y a Dani Vivian le bautizó como el ‘teniente’, cantando «y si te chocas con Dani, p’al hospital» con la melodía de la canción ‘La Bamba’.
Posteriormente, tras recordar el gol de Mikel Merino ante Alemania en cuartos de final y decir de sí mismo que «daría la vida» por ganar la Eurocopa; continuó destacando la calidad del «fundamental» Fabián Ruiz; y a Joselu Mato como uno de los mejores ‘nueves’ que ha visto en su vida. Por otra parte consideró que ahora Dani Olmo vale «130 millones» después de ensalzar el gol que sacó de cabeza bajo palos en la final.
El siguiente fue Ferrán Torres, quien «enseña lo que es no rendirse y volver una y otra vez». A Álex Grimaldo le catalogó como «fundamental» para el grupo y «un auténtico fenómeno»; en el caso de Álex Remiro ponderó que es «es uno de los que más ha jugado fuera del campo» pese a no tener protagonismo dentro de él; y a Aymeric Laporte le resaltó como «una bestia» que podría luchar en la UFC. Acto seguido entonó «Gibraltar es español», un mensaje que más adelante repitió Rodri Hernández.
Del centrocampista, que asomó después de un Álex Baena al que bautizó como el «Ilia Topuria español», aseguró que merece «algún premio gordo individual». Ademas bromeó con que a Nico Williams en Bilbao «le han echado una gasolina que no existe»; y agradeció a Martín Zubimendi su aportación en la final, subrayando que cuando más le necesitaban estaba allí.
Luego fue el turno de Lamine Yamal, quien según él «ha pasado de liarla en clase a liarla en la Eurocopa»; del ‘mago’ Pedri; de Mikel Oyarzabal, que con su gol para dar el título a España «ha cambiado la historia del fútbol español»; de la ‘leyenda’ Jesús Navas; y de Unai Simón, que ‘da más seguridad que tener el dinero en el banco’.
Los últimos fueron Marc Cucurella, de quien aseguró que «los ingleses ya no sueñan con el Coco, sueñan con el Cucu»; Fermín López, «futuro de la selección» que «ha pasado de estar en el fútbol de verdad a la absoluta»; Ayoze Pérez, que tomó el micrófono para animar a apreciar el talento que hay en España; y Pablo Gaviria ‘Gavi’, que aunque se perdió el torneo por lesión ha sido «parte importante de esto».
Hubo también protagonismo para el seleccionador Luis de la Fuente: «Has sido el primero de toda España en confiar en tus jugadores, el primero en decirnos que esto se podía hacer y que se podía ganar».
Este respondió a esas palabras: «Es un orgullo para mi, que lo traslado al cuerpo técnico, poder dirigir a un grupo de jugadores y de personas como son estos extraordinarios futbolistas. Representan una escuela de valores, superación, sacrificio, trabajo, compañerismo, humildad, generosidad, talento, categoría… un ejemplo para este país, para España. Que sigamos así, unidos».
Tras ese momento de complicidad, ante una plaza presidida por la fuente que estaba iluminada con los colores de la bandera de España; se sucedieron las actuaciones musicales de Aitana; Almacor con la canción ‘Brillos platino’; e Isabel Aaiún con ‘Potra salvaje’. Incluso el propio De la Fuente se animó a entonar ‘Quijote’ de Julio Iglesias junto al ex internacional y amigo Patxi Salinas.
El ‘We are the Champions’ de Queen fue la guinda a un inolvidable lunes de celebraciones que arrancó en Berlín, ciudad donde el equipo conquistó el título y desde la que despegó a las 12:20 horas de la mañana rumbo al aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, que les recibió en torno a las 15:00 horas.
En la pista de aterrizaje se produjo una de las imágenes más esperadas, la de la primera fotografía del trofeo en España para la que posaron el capitán Álvaro Morata; el seleccionador Luis de la Fuente; y el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Pedro Rocha.
Posteriormente todos los integrantes de la expedición, que se inmortalizaron en grupo junto al avión de modelo Airbus A321 bautizado como ‘Delta del Llobregat’, se dirigieron a descansar en autobús para afrontar la que iba a ser una intensa agenda vespertina.
Esta empezó en torno a las 18:45 horas en el Palacio de la Zarzuela, donde fueron recibidos por el rey de España, Felipe VI; quien acompañado por la reina Leticia; y por las hijas de ambos; la Princesa Leonor y la Infanta Sofía; señaló: «Estamos satisfechos con vuestro trabajo. Vuestro legado es inmenso. Gracias por vuestro esfuerzo y por jugar como jugáis».
De ahí el equipo se dirigió hasta el Palacio de la Moncloa, donde les esperaba el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; junto al presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), José Manuel Rodríguez Uribes; y la ministra de Educación, FP y Deportes, Pilar Alegría.
«Enhorabuena a todos y cada uno de vosotros. Además de la enhorabuena quería daros las gracias por haber dado la mejor versión de España, por haber mostrado capacidad de esfuerzo, de remontada, de espíritu de equipo, de preparación, de estrategia y de juego limpio y juego bonito», señaló Sánchez.
«En el deporte, y sobre todo en el de competición, uno a veces se lleva la sensación de que no ha ganado el mejor, porque no ha ganado el que mejor ha jugado. Y a veces se juega muy bien y no se ganan los torneos. En esta ocasión tenemos una Selección que ha jugado de cine y que ha ganado la cuarta Eurocopa para España», añadió.
Esa parada fue el paso previo al fin de fiesta, antes del cual se realizó un recorrido en autobús descapotado entre multitud de seguidores que pasó por zonas destacadas de la capital de España como Moncloa; la calle Alberto Aguilera; la Glorieta de San Bernardo; la Plaza de Colón o la Puerta de Alcalá.