CIUDAD DE MÉXICO, octubre 5 (EL UNIVERSAL).- Lis Vega recuerda que su primer matrimonio fracasó, literalmente, el día en que se casó, no sólo porque su prometido era un hombre homosexual, de lo que se enteró años después, sino porque durante la celebración besó a otra mujer.
En una reciente entrevista con Matilde Obregón, la vedette cubana reveló que se casó con su ex, Federico Díaz, por los problemas económicos que atravesaban por esa época.
Era 2007 y Lis decidió vender la exclusiva a la revista «TVNotas», de hecho, fue la propia Obregón quien asistió para cubrir el evento, que tuvo lugar en una de las playas del puerto de Acapulco.
«Sí, me casé para vender la boda a ‘TVNotas’ porque no teníamos dinero, ¿me equivoqué?, no, no me equivoqué, tenía mucha necesidad económica y mucha gente que mantener, bocas», dijo.
Y aclaró que la homosexualidad de Díaz no fue la causa por la que se disolvió su matrimonio, sólo tres días más tarde, sino porque, durante la ceremonia, su esposo besó a otra mujer.
«Nosotros no duramos ni tres días casados, porque yo me arrepentí».
Fue la madre de la cubana, Marta Elena Gálvez, que se percató del momento en que Federico estaba besándose con una de las invitadas, con la que tenía una relación en secreto; al darse cuenta de lo que sucedía la señora advirtió a su hija inmediatamente.
«Realmente eso era una farsa, no iba para ningún lado y la falta al respeto que él había tenido a mi persona de besarse con la novia que supuestamente tenía frente a la jueza y mi mamá, yo me voy de ahí y pienso ‘¿qué estoy haciendo?’, o sea lo que mal empieza, mal acaba».
«Yo siempre he tenido mucho carácter, cuando a mí me agarra el veinte de algo (y) es válido retractarse, lo que no puedes es seguir mintiéndote a ti, yo doy el cien, si las cosas no me gustan, yo no me voy a quedar callada», precisó.
Fue así que se sentó a hablar con Federico y le pidió que se separaran, noticia que dieron posteriormente a sus familiares.
«Le dije: ‘¿sabes qué?, esto es una farsa’, y me senté frente a su familia y la mía, les dije: ‘discúlpenme, qué bueno que vinieron, gracias, yo me voy, esto es una farsa’ y me fui».
Aunque, cabe destacar que no dio a conocer la noticia de forma pública sino hasta cuatro meses más tarde, época en que se filtraron una serie de fotografías en las que Lis besaba a otro hombre, por lo que, en ese momento, se llegó a especular que ella había sido la causante de la separación, aunque no había sido así.
Afirmó que su arrepentimiento no estribó en casarse, pues realmente necesitaba el dinero que ganó, sino en el hecho de haber lastimado a su madre, que se angustió mucho porque no supo de su paradero por varios días.
«Para mí no era un matrimonio porque era por dinero y el dinero me cayó muy bien; lloré porque, de lo que sí me arrepiento, fue que mi mamá se preocupó por mí mucho, porque me estuvieron buscando hasta con la policía, me arrepentí de haber lastimado a mi madre, muchísimo», reiteró.
Fue hasta siete años más tarde, cuando Díaz contactó a Lis para compartirle su verdadera identidad sexual, pues estaba por darla a conocer públicamente.
«Yo no sabía que el era gay, le agradezco que él me dijo siete años después, platicamos, todavía no había hecho el anuncio, cada quién es dueño de su vida y sus emociones y estamos en constante evolución, si su evolución fue darse cuenta de lo que él está orgulloso hoy en día, yo siempre voy a querer que las personas sean felices y se realicen, yo nunca he sido de hablar mal de mis ex, aunque mal me paguen».
En la actualidad, la vedette está casada con el músico cubano Naldo Uwe, 20 años menor que ella.