En una operación conjunta entre agencias federales de Estados Unidos, se desmanteló una red de lavado de dinero que operaba en Carolina del Sur y Georgia, vinculada a cárteles mexicanos como el de Sinaloa y el Jalisco Nueva Generación (CJNG). Tres individuos fueron detenidos por su presunta participación en el blanqueo de al menos 30 millones de dólares provenientes del narcotráfico.
Los acusados fueron identificados como Nasir Ullah (28 años) y Naim Ullah (32 años), residentes de Sumter, Carolina del Sur, y Puquan Huang (49 años), originario de Georgia. Según el Departamento de Justicia de EE. UU., los detenidos viajaban por todo el país recolectando ganancias ilícitas generadas por la venta de drogas como cocaína y fentanilo.
Una vez obtenidos los fondos, los implicados coordinaban con cómplices en China para realizar transacciones financieras diseñadas para ocultar el origen del dinero. Entre los métodos utilizados destaca la compra de aparatos electrónicos con los ingresos del narcotráfico, los cuales eran enviados a China y al Medio Oriente, facilitando así el lavado de dinero.
Las autoridades estadounidenses advirtieron que, de ser hallados culpables, cada uno de los acusados podría enfrentar una pena máxima de 20 años de prisión. Esta operación subraya el alcance global de las redes de lavado de dinero asociadas al crimen organizado mexicano y la colaboración internacional necesaria para combatirlas.