CIUDAD DE MÉXICO, octubre 26 (EL UNIVERSAL).- El secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, acusó al gobierno del expresidente Felipe Calderón de torcer el rumbo del país al emprender una «absurda» guerra contra el narcotráfico, además de institucionalizar la corrupción entregándole armas de fuego al crimen organizado.
Al sostener un diálogo con los diputados del Congreso de San Luis Potosí para hablar de la reforma que extiende hasta 2028 la presencia militar en las calles, el funcionario afirmó que el brazo de la justicia alcanzará a los responsables de esa guerra y de la entrega de armas de fuego al crimen organizado.
«Eso es un crimen de lesa humanidad y por eso afortunadamente ya está detenido en los Estados Unidos el exsecretario de Seguridad Pública del gobierno de Felipe Calderón y seguramente llegará el brazo de la justicia, llegará porque hay investigaciones de carácter internacional que ayudarán a que finalmente los mexicanos podamos cerrar esa desgraciada página de la historia, pero yo le aseguro que nunca más en México volveremos a vivir un episodio como ese», remarcó.
Rechazó las críticas de la diputada panista Liliana Flores, quien calificó de fallida la estrategia de seguridad pública del gobierno federal y llamó a construir instituciones de seguridad civil.
«Estamos aquí porque quienes tuvieron la responsabilidad de conducir los destinos del país torcieron el rumbo, por decirlo de manera elegante. No fue este gobierno el que sacó a los militares a las calles una oscura mañana del 6 de diciembre de 2006 y llevaron a nuestras fuerzas armadas a una absurda guerra contra el crimen organizado, so pretexto de que se iba a combatir al narcotráfico», enfatizó.
El titular de la Secretaría de Gobernación aseguró que recordó que «no fue este gobierno el que en el colmo de lo absurdo institucionalizó la corrupción, entregando incluso armamento que debía de destinarse a nuestras fuerzas armadas en algo que se conoce como Rápido y Furioso. Prefirieron hacer pingües negocios a costa de la seguridad, de la tranquilidad de los mexicanos. Imagínense ustedes, se atrevieron a que un armamento de primera generación que debía ser utilizado por nuestras fuerzas armadas, que tenían incluso una especie de geolocalizador, en un absurdo convenio con un gobierno extranjero, fueron entregadas sin ningún miramiento el crimen organizado».
Adán Augusto López recriminó que por ese operativo, perdieron la vida no nada más elementos de las fuerzas armadas, sino muchos inocentes mexicanos. «Eso es un crimen de lesa humanidad», insistió.
