CIUDAD DE MÉXICO, mayo 21 (EL UNIVERSAL).- Para tener suerte, Alejandro Fernández mandó hacer un traje de charro color café claro, similar a uno que portaba orgulloso su padre en los conciertos, para lucirlo en sus presentaciones musicales.
La noche de ayer sábado, durante la parte final de su show en la Plaza de Toros México, el «Potrillo» salió con el nuevo vestuario de su armario.
«Para que me dé suerte», dijo ante las 50 mil personas reunidas en el lugar.
«No pudo ser más perfecto», exclamó Alejandro Fernández al ver que la lluvia lo respetó.
No lo dijo por él, sino porque de alguna manera se repetía lo experimentado por su padre hace casi cuatro décadas cuando estaba por ofrecer concierto en la Plaza de Toros México.
Esa vez, al igual que ayer sábado, una fuerte lluvia se abatió en la Ciudad de México y poco antes del concierto, se detuvo.
«El me enseñó a dar los primeros pasos en la vida», dijo ahora a su público.
Porque el recital que ayer le tocó fue también una manera de honrar al «Charro de Huentitán». «Se la dedicamos al viejo», indicó para presentar «Luna viajera».
Porque la velada no podía dejar de incluir canciones que su padre siempre ponía en sus presentaciones como «Volver» y «México, lindo y querido», canción última para la que pidió al público ponerse en pie.
Es más. Para la última parte del concierto se desapareció unos minutos para regresar portando un traje color café claro similar al que usaba su papá.
«Para que me de suerte», indicó.
«Han sido muchos meses duros para mi familia, perdí a mi maestro, a mi amigo, México perdió al mejor cantante de todos los tiempos», consideró en su mensaje.
Un popurrí de canciones de Chente como «Por tu maldito amor», «De qué manera te olvido» y «Hermoso cariño» integraron una parte fundamental de la presentación.
Con nieto nuevo
Hacia la parte final, alguien le llamó de la parte baja del escenario y le entrego una fotografía de algo que le emocionó. «Tendré nuevo nieto», exclamó mientras sostenía la imagen en su mano. Nunca dijo quién de sus hijos le dará un bebé y se limitó a felicitarlos.