Aguascalientes.- Las mujeres constantemente son víctimas del machismo, cuando son agredidas y violentadas tanto física como verbalmente; no obstante, existe un machismo silencioso que se ejerce sobre todo desde las empresas y los gobiernos, donde se les niega a las mujeres la oportunidad de ascender en el ámbito laboral, tachándolas de incapaces para desarrollar tal cargo.
Héctor Grijalva Tamayo, especialista en salud mental, mencionó que lamentablemente existen muchas formas de violencia hacia las mujeres, y si bien las más reconocidas son aquellas donde son agredidas por sus parejas al interior del hogar, hay otras tantas que se llevan a cabo desde el ámbito laboral.
Grijalva Tamayo mencionó que existe un “machismo invisible, que es el machismo elegante, fino y sutil que ejerce el hombre inteligente, el hombre empresario, el jefe, el patrón; puede ser extraordinariamente machista, violentador psicológicamente, moralmente, económicamente, no es el que grita, es el que anda elegantemente vestido, pero de todas maneras limita a la mujer, no le concede autoridad, no le da buenos sueldos, no le permite que ascienda en la jerarquía, ese es el machismo invisible”.
Este machismo invisible, dijo, es el dominante, pues es el más común de todos, aunque es más complicado de detectar, “el otro es muy fácil de identificar, el hombre gritón, borracho que golpea, es muy fácil de identificar, pero éste pasa desapercibido, se cree que no es machista, entonces, por eso ha proliferado tanto en la sociedad”.
Este tipo de machismo “se da en todos los niveles jerárquicos, estamos hablando de la empresa privada, pero también en el sector público, en los niveles de gobierno; en las oficinas de gobierno se da muchísimo, porque hay una jerarquía, hay un mando superior que hace que se sienta esto. El machismo invisible se ve en este dominio que tienen los hombres en todos los campos de poder”.
