México, 14 feb (EFE).- Los países de América Latina y el Caribe reafirmaron este viernes su compromiso a favor de la no proliferación y el desarme nuclear, durante la conmemoración del 53 aniversario de la apertura a firma del Tratado de Tlatelolco, para la Proscripción de las Armas Nucleares en la América Latina y el Caribe, en la capital mexicana.
Mediante un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México informó que al evento asistieron representantes de más de 60 Estados acreditados en México, entre los que destacaron los Estados miembros del Organismo para la Proscripción de las Armas Nucleares en América Latina y el Caribe (OPANAL).
Entre las actividades conmemorativas se desarrolló una mesa académica de discusión sobre la relevancia del Tratado, una presentación artística y un concurso de dibujo infantil.
La actividad artística se dio con la presentaron del «performance» Amnesia Atómica, una instalación por el desarme nuclear que expone una escultura inflable con forma de hongo.
Los organizadores explicaron que dicha instalación recorrerá varias ciudades del mundo y este fin de semana estará en la Plaza de las Tres Culturas, en el barrio de Tlatelolco en Ciudad de México.
La campaña, que reúne a activistas, artistas, organizaciones civiles y gubernamentales con el objetivo común de un mundo libre de armas nucleares, arrancó precisamente en la Plaza de las Tres Culturas.
El citado lugar fue el escenario de la apertura a firma del Tratado de Tlatelolco, el 14 de febrero de 1967 el cual prohíbe el desarrollo, adquisición, ensayo y emplazamiento de armas nucleares en América Latina y el Caribe.
«En un escenario internacional convulso, para México, fiel a su tradición diplomática y sus principios de política exterior, la conmemoración del Tratado de Tlatelolco representa una oportunidad para redoblar esfuerzos en favor del desarme y la no proliferación nucleares, con miras a contribuir a la consolidación de un mundo en paz», apuntó la nota.
El Tratado de Tlatelolco, una importante contribución de la diplomacia mexicana a la paz y seguridad internacionales, surgió en la época de la Guerra Fría, como respuesta a la amenaza de un posible enfrentamiento directo, en el Mar Caribe, entre Estados Unidos y la entonces Unión Soviética.
El acuerdo logró que América Latina y el Caribe fueran la primera región densamente poblada libre de armas nucleares.
En reconocimiento a este hito diplomático, el embajador Alfonso García Robles, quien encabezó los esfuerzos de México durante la negociación del Tratado de Tlatelolco, recibió el Premio Nobel de la Paz en 1982.