CIUDAD DE MÉXICO, diciembre 29 (EL UNIVERSAL).-
Al terminar un año y comenzar otro, las personas suelen seguir tradiciones para la buena suerte, el amor, el trabajo. Algunas son más conocidas, como usar ropa interior de colores dependiendo de lo que se desee lograr en el año que inicia, pero hay otras que son un tanto extrañas. Aquí te presentamos diez de ellas.
Romper platos en Dinamarca
En este país se acostumbraba romper platos contra las puertas de los vecinos y amigos, a modo de desearles buena suerte. Entre más platos rotos hubiera frente a la puerta significaba más suerte -y tener más amigos-. Aunque ahora ya no se hace tanto, hay personas que mantienen todavía esta rara -y costosa- tradición.
Prohibido comer cangrejos o langostas en Croacia
En la cena de Año Nuevo, los croatas evitan comer cangrejo o langosta. ¿La razón? Estos animales se mueven hacia los lados o hacia atrás, lo que, según dicen locales, podría significar contratiempos en el futuro.
Leer el futuro en metales en Europa, o en un huevo, en Perú
Aunque es conocido que hay personas que pueden leer el futuro en la palma de la mano, lo que no es tanto es que en naciones como Alemania, Austria o Finlandia, en la Nochevieja se acostumbra poner plomo o metales recién fundidos en un vaso agua fría para obtener figuras. Dependiendo de la forma de la figura es como le irá a la gente en el año.
En Perú, en cambio, la costumbre es poner un huevo entero bajo la cama en Nochevieja. Al día siguiente, el dibujo que dejó la yema definirá la suerte que tendrá la persona en el año.
Reino Unido y Grecia: la primera visita del año
En Reino Unido se elige a un hombre, de preferencia desconocido, que debe entrar justo a la medianoche con sal, carbón y pan. Eso garantiza que en el año que inicia habrá abundancia de comida, dinero y calor. Eso sí: el «invitado» no debe ser rubio o pelirrojo, porque es de mala suerte. En Grecia se sigue la tradición, pero con una variante: la primera persona que debe entrar a la casa en el primer minuto del año de preferencia debe de ser un niño, por considerarlos los más inocentes y de buena voluntad. Luego, se rompe una granada contra el suelo, que significa abundancia en el hogar.
Vestirse con figuras de topo en Filipinas
La última noche del año, muchos filipinos se visten con cualquier cosa que tenga figuras de topo, ya sea en la ropa, en los zapatos o en las bolsas. De preferencia debe ser algo que tenga bolsillos, para meter monedas y hacerlas zonas justo a la medianoche. La explicación es que los filipinos asocian a los topos con el dinero y la prosperidad.
Un beso a la medianoche en Estados Unidos
Para asegurarse de que el amor no faltará en el año que inicia, o que las relaciones de pareja fluirán, los estadounidenses tienen como tradición besarse en el primer minuto del Año Nuevo.
108 campanadas en Japón
Los templos budistas tocan las campañas 108 veces en la Nochevieja, una tradición conocida como «joya no kane». El número representa los 108 pecados que, dicen, la gente puede terminar cometiendo. El escuchar las campanadas, afirman, purifica el alma.
Echar agua por la ventana en Puerto Rico
Al llegar la medianoche, los puertorriqueños acostumbran echar cubos de agua por la ventana. De ese modo, se deshacen de los problemas del año que termina. Luego, limpian las calles para recibir el Año Nuevo, lo que significa que lo que entrará será todo limpio, libre de problemas. En algunas casas, las familias se dedican a limpiar toda la casa para garantizar que el año entrante les irá bien.
Salir con maletas a dar la vuelta a la manzana en Latinoamérica
En países como Colombia, Chile, o México, una de las tradiciones es salir con una maleta al terminar el año y correr alrededor de la manzana. Con eso, afirman, garantizan que el año que inicia estará lleno de viajes.
Fiesta en el cementerio en Chile
En la localidad chilena de Talca, a las 23:00 horas del año que termina se abren las puertas del cementerio. En este caso, no es una tradición para atraer la buena suerte, sino simplemente, para recibir el año con los seres queridos.