CIUDAD DE MÉXICO, julio 27 (EL UNIVERSAL).- El resultado (0-0) entre el Atlético La Paz y el Celaya, dentro de la Liga de Expansión, fue lo de menos para la gran mayoría; claro, salvo los aficionados de ambos equipos, sobre todo los que asistieron al recién remodelado estadio Guaycura.
Porque lo reflectores no estaban puestos en los jugadores, sino en esas tres mujeres que vistieron de fluorescente e hicieron historia en el balompié mexicano. Por primera vez, tres árbitras dirigieron un partido varonil a nivel profesional en México, lo que explicó la enorme sonrisa que esbozaron previo al silbatazo inicial de Katia Itzel García, quien comandó al equipo.
Las experimentadas Karen Janett Díaz (quien será mundialista en Qatar 2022) y Enedina Caudillo le acompañaron por las bandas. Misión cumplida. Porque, salvo los sobresaltos normales de un partido, no tuvieron problemas y resolvieron bien las diferentes situaciones que se les presentaron.
Desde los minutos iniciales, García dejó claro que no permitiría aspavientos. Tardó poco más de media hora en mostrar su primera tarjeta amarilla, pero no dejó que los futbolistas le hicieran reclamo alguno. Exitoso debut para un equipo de trabajo que ya es histórico.