León (México), 3 oct (EFE).- Alejandra Arellano, coach asistente de las Abejas de León y primera mujer en ocupar este cargo en la Liga de baloncesto mexicano, reconoció este sábado que su trabajo influirá en que más mujeres se integren a ese deporte en el país.
«Tengo responsabilidad de que las jugadoras que también son entrenadoras y las mujeres que trabajan a nivel formativo se integren en el futuro al baloncesto mexicano, soy un referente para lo que sigue», le explicó a Efe.
Arellano, de 35 años, fue nombrada a inicios de agosto como coach asistente del argentino Marcelo Roig en las Abejas de León, equipo de la Liga Nacional de Baloncesto Profesional (LNBP) de México, para la temporada 2020.
La antigua seleccionada mexicana está en el baloncesto desde los seis años, influencia de su madre, quien practicó este deporte en ligas locales de su natal Guanajuato y fue «probablemente» la primera persona en darle una pelota naranja.
Desde hace 10 años inició su carrera como entrenadora a nivel escolar desde primaria hasta universidad, en donde aprendió a «enseñar lo básico del baloncesto» y a ser estratégica, algo que se complementa con el estilo de Roig.
«Hasta ahora (a 20 años de la fundación de la LNBP) le dieron la oportunidad a una mujer para ser asistente porque las mujeres tomamos fuerza en todos ámbitos, sobresalimos más y ocupamos puestos que nos negaron durante mucho tiempo. El mundo avanza, ya no se separa por géneros sino por capacidades», expresó Arellano.
La antigua jugadora de las Mieleras de Guanajuato en la Liga femenina mexicana, reconoció ser una mezcla de sus antiguos estrategas desde su infancia hasta su edad adulta, además de admirar al español Sergio Valdeolmillos y a los estadounidenses Phil Jackson y Gregg Popovich «De los tres me gusta su forma de juego, trabajan en equipo, no se van con una estrella, Jackson, a pesar de que traía a Kobe (Bryant en los Lakers) y (Michael) Jordan (en los Bulls), sus equipos nunca se basaron en un jugador», aseguró la mexicana.
A Marcelo Roig, a quien asiste en las Abejas, le aprende «su temple para resolver situaciones sin desesperarse» y su parte estratégica para ver el baloncesto no de una forma superficial sino «ir más allá».
«Mi función en el cuerpo técnico de Marcelo es dar un punto de vista diferente, a veces reafirmar su estrategia que tiene bien estudiada y estar al pendiente de los tiempos y de las estadísticas», expresó la mexicana.
Su más grande sueño como entrenadora es pertenecer a la selección mexicana ya sea al mando de un combinado mayor o en categorías inferiores.
La coach sabe que el baloncesto mexicano puede hacer más para abrir espacios a las mujeres y es clara en lo que hace falta.
«Necesitamos apoyo, no solo moral, sino económico, que se nos pague igual que a los hombres. En la selección mexicana a los hombres les pagan y a las mujeres no, entonces debes decidir entre quedarte y sobrevivir o irte. El salario de un hombre a nivel profesional se triplica al de las mujeres», concluyó.