Arturo Moreno y Aglae García Arenas fueron desposados en el templo del Señor del Encino durante una ceremonia que comenzó en punto de las cinco de la tarde, cuando el sacerdote los recibió para invitarlos a tomar sus lugares.
Muy atentos se mostraron los enamorados, quienes más tarde hicieron su juramento ante el altar y se prometieron amor y fidelidad hasta que la muerte los separe.
Finalmente, fueron bendecidos y declarados marido y mujer, por lo que salieron del templo para trasladarse al salón donde se llevó a cabo la recepción de la boda y disfrutaron de una romántica velada junto a sus seres queridos.