Madre e hijo, ambos adultos mayores, fueron asesinados en su domicilio en el municipio de San Francisco de los Romo.
Ambos fueron golpeados y atacados con un arma blanca, al parecer un machete, por lo que la Fiscalía General del Estado inició una carpeta de investigación para establecer el o los móviles del doble homicidio e identificar al o los responsables.
Las víctimas fueron identificadas como María Teresa Hernández Luna, de 78 años de edad, y Lucio Cleto Hernández, de 60 años.
Él resultó con dos órdenes de aprehensión cumplimentadas en Aguascalientes por robo calificado y una más por robo de ganado en el Estado de Zacatecas, además de que en otras seis ocasiones fue detenido por causar disturbios y drogarse en la vía pública en “San Pancho”.
Los crímenes se consumaron en su domicilio, en el 417 de la calle Bienestar del fraccionamiento San José del Barranco, en dicha cabecera municipal.
Elvia, de 41 años de edad, hija de María Teresa y hermana de Lucio, alrededor de las 11:10 horas de este lunes, acudió a visitarlos, pero al ingresar a la casa los encontró tirados en el piso, golpeados, ensangrentados e inconscientes.
De inmediato solicitó ayuda a emergencias y al sitio se trasladaron oficiales de las Policías Estatal y Municipal de San Francisco de los Romo, así como paramédicos del ISSEA en la ambulancia ECO-337.
A madre e hijo les apreciaron heridas producidas por arma blanca en diferentes partes del cuerpo, al parecer provocadas con un machete, y comprobaron que ya no presentaban signos vitales.
Los elementos de Seguridad Pública acordonaron toda la calle para proteger el escenario de los dos asesinatos y dieron parte a la Fiscalía Estatal.
Agentes de la Policía de Investigación se presentaron en el lugar y entrevistaron a Elvia para conocer su versión de los hechos así como a los vecinos del lugar para recabar información que les ayudara al esclarecimiento de los homicidios.
Elementos de la Dirección General de Investigación Pericial hicieron acto de presencia en el domicilio para llevar a cabo los correspondientes trabajos de campo.
Al terminar sus diligencias, trasladaron los cuerpos al Laboratorio de Medicina Forense para la práctica de los estudios de necropsia.