CIUDAD DE MÉXICO, marzo 28 (EL UNIVERSAL).-
Audrey Haley, la persona transgénero que el lunes disparó contra seis personas en una primaria cristiana en Nashville, Tennessee, tenía en su poder siete armas de fuego que adquirió legalmente.
La policía informó este martes que Haley, quien se identificaba como «él», compró las siete armas de cinco tiendas diferentes. Tres de esas armas: dos rifles de asalto y una pistola fueron utilizadas en el ataque del lunes, que se saldó con tres niños y tres adultos muertos.
La policía abatió a Haley.
Los padres de Haley, informó NBC News, no sabían que ella -así se refirieron a la persona atacante- tuviera esas armas y de hecho pensaban que no debería tenerlas debido a su estado emocional.
La policía entrevistó a los padres, quienes dijeron que Haley estaba bajo atención médica por un desorden emocional. Desconocían que Haley tuviera armas en casa, excepto por una que, les dijo, había vendido, pero la policía encontró varias.
Averiana Patton, excompañera de Haley en el equipo de basquetbol, dijo a NBC que ella, de quien desconocía fuera transgénero, envió mensajes a través de Instagram a las 9:57 de la mañana, menos de 20 minutos antes de que la policía comenzara a recibir llamadas sobre un tirador en la escuela.
En sus mensajes, Haley decía que ya no quería vivir y que su familia no sabía lo que estaba a punto de hacer. En su primer mensaje firmó como «Audrey (Aiden)».
Patton se alarmó con los mensajes y se los envió a su padre, preguntando si debía contactar a alguien. Su padre le dijo que sí, y fue cuando llamó a las autoridades.