CIUDAD DE MÉXICO, abril 4 (EL UNIVERSAL). –
El Atlas de Guadalajara aguantó lo que se le vino encima cuando Andrés Santamaría se fue expulsado al terminar la primera parte.
Pero le faltaron un par de minutos para que la defensa heroica cantara «victoria».
Minuto 88, los Rojinegros habían sobrevivido a todo lo que el Philadelphia Union generó, con un Camilo Vargas de nueva cuenta levantándose como el héroe.
Pero al final un error, una falla del mismo Camilo, quien arrolló en una salida precipitada a un atacante rival, provocó que todo el sufrimiento no valiera de nada.
Se marcó penalti y Daniel Gazdag lo hizo gol, en un disparo que casi detiene el portero colombiano.
Derrota que duele pero que no es definitiva, ya que todo quedó abierto y por definirse en el estadio Jalisco en el juego de vuelta por los cuartos de final de la Liga de Campeones de la Concacaf.
El juego del Atlas no fue malo. Antes de la expulsión fue el equipo que tuvo las mejores llegadas con acercamientos de Ozziel Herrera y el mismo Julián Quiñones.
Parecía cuestión de tiempo para que el gol mexicano cayera, pero en una descolgada del Philadelphia, Santamaría hizo una falta y como último hombre se fue expulsado.
Vino la labor heroica del Atlas, con sendos cruzamientos de la defensa y sendas atajadas de Camilo, pero al final, el gran héroe se volvió en el villano, provocó el penalti y Atlas regresa a casa con la desventaja, eso sí, no parece definitiva.