México.- El PIB mexicano de la construcción podría contraerse hasta el 20 % en «la depresión más prolongada» que atraviesa el sector, pronosticó este jueves BBVA México.
En un reporte, el banco estimó que la construcción podría mantenerse en terreno negativo en 2021, cuando caería 7,3 %, por lo que la recuperación podría vislumbrarse hacia finales de 2021 y consolidarse con un «moderado crecimiento» en 2022.
Pese a la crisis de la COVID-19, la institución recordó que el sector ya cumple dos años en terreno negativo, el período más largo desde la crisis de 2001 al apuntar que la obra civil se ha contraído de forma continúa por una menor inversión.
«El PIB de la construcción atraviesa por su depresión más prolongada, en gran medida por la emergencia sanitaria de la pandemia del COVID-19, pero también por la ausencia de un Plan Nacional de Infraestructura en la actual administración que revela la falta de rumbo», afirmó BBVA.
La pandemia ha dejado más de 743.000 contagios y 77.646 muertos confirmados de COVID-19, pero también ha provocado una contracción anual histórica de la economía de 18,7 % en el segundo trimestre de 2020.
El banco BBVA auguró que la economía mexicana no se restablecerá por completo de los efectos de la pandemia y de la recesión del 0,3 % de 2019 hasta el año 2023 o 2024 porque la recuperación que está iniciando es «muy lenta».
En el informe anterior de «Situación Inmobiliaria México», en mayo, BBVA había pronosticado una contracción del PIB de la construcción de 13 % este año, lo que equivale a una pérdida de 160.000 millones de pesos (7.330 millones de dólares).
El estudio reportó una caída de 37 % en el valor bruto de las obras energéticas en el segundo trimestre, mientras que el correspondiente al sector de comunicaciones y transporte promedió una reducción de 29,1 %.
En el segundo trimestre, añadió, el valor de la producción en los sectores público y privado registró contracciones de 30 % en términos anuales.
El reporte también informó que el sector ha logrado un crecimiento de su ocupación laboral de apenas 1 % porque la «industria de la construcción es intensiva en mano de obra y podría estar constituyendo un refugio en el mercado laboral de otros sectores».
Aun así, BBVA recordó que la pérdida de empleos entre marzo y junio fue de 1,1 millones de trabajadores, un número que podría alcanzar 1,5 millones al cierre del año.
Por ello, aseveró que el sector está «en la peor crisis desde 2009», cuando se perdieron 700.000 empleos.
Pese a la situación económica, el banco encontró que los precios de la vivienda en México crecieron a tasas cercanas al 10 % en su último ciclo.
«Por el lado de la oferta, los costos de la construcción han sido relevantes. Sin embargo, la contracción en la demanda ya se refleja con una desaceleración en los ritmos de apreciación», aclaró.