La senadora priista Beatriz Paredes Rangel demandó la aclaración de la muerte de 40 personas ocurrido hace un año en una estación migratoria en Chihuahua y exigió la renuncia del titular del Instituto Nacional de Migración (INM), Francisco Garduño.
Dijo que es inconcebible que un gobierno progresista tenga un trato «suave y comprensivo» con las autoridades que permitieron que sucediera lo que en la sede senatorial fue calificado como un crimen de estado en las instalaciones del INM de Ciudad Juárez.
Paredes sostuvo que las legisladoras y los legisladores de todas las fracciones parlamentarias tienen que lograr un acuerdo como el que recientemente se alcanzó para condenar al senado de Texas por una ley claramente violatoria de los derechos humanos de las y los migrantes.
«No se trata de defender a una autoridad o a otra autoridad, se trata de ser consistentes con la defensa de los derechos humanos. Y lo mismo que le exigimos a las autoridades de Estados Unidos, tenemos que tener la capacidad de ejercitarlo en México», aclaró.
Precisó que el tema debe ser tratado con amplitud de miras y con la convicción de que los derechos humanos es un valor que comparten todos los legisladores.
Agregó que es indispensable la aclaración del crimen de Estado en Ciudad Juárez por el que murieron 40 personas, así como la renuncia al titular del Instituto Nacional de Migración.