José Alfredo Díaz Serna y Martha Aurora de Loera Aguilar unieron sus vidas por medio del Séptimo Sacramento de la ley de Dios.
Ellos eligieron el templo de San Antonio de Padua para recibir la bendición de su amor, lugar que se vio concurrido por los familiares y amigos de los novios.
El sacerdote preguntó a los enamorados si estaban dispuestos a amarse y a respetarse como esposos, así como a recibir con amor a los hijos que Dios les mande, a lo que contestaron afirmativamente aceptándose como esposos.
Al finalizar la ceremonia, José Alfredo y Martha Aurora se trasladaron con sus invitados a conocido salón, en donde se ofreció una fiesta en su honor.